Entrar Via

Cuando el Anillo Cayó al Polvo romance Capítulo 240

Ante la mirada llena de sospecha de Arturo, Joana abrió el historial de pedidos para mostrarle la verdad.

—Oh… —Arturo torció la boca en una sonrisa que no ocultaba el doble sentido—. Así que era por eso, señorita Joana.

Las mejillas de Joana se encendieron de inmediato.

—A veces no me queda de otra…

Un pequeño truco para hacer trampa.

Arturo se recargó con calma en el asiento del carro, observando sus orejas rojas como tomates.

—¿Y la vez que me trajiste sopa? ¿También fue porque no te quedaba de otra?

—¡Para nada! —Joana contestó rápido, casi atropellando sus palabras—. Esa yo la preparé yo solita.

Por gusto… aunque no se atrevió a decirlo en voz alta.

Arturo soltó una risita, pero no agregó nada.

Seguía igual que cuando eran niños.

Apenas se ponía nerviosa, se le coloreaban las mejillas.

Tal vez era mejor así, que no recordara nada de antes.

Si no tenía recuerdos, tampoco habría pesadillas por todo lo malo que vivió.

...

Al llegar al edificio, subieron juntos en el elevador.

En cuanto Joana salió, notó que la puerta de su departamento estaba abierta de par en par.

La chapa se veía tirada, a la vista, sobre el tapete de la entrada.

Un escalofrío le recorrió la espalda.

¿Se habrían metido a robar?

Volteó de reojo hacia el hombre que la acompañaba.

Arturo ya se había puesto serio.

—Voy contigo —aseguró, con voz firme.

Joana asintió, agradecida.

Capítulo 240 1

Verify captcha to read the content.VERIFYCAPTCHA_LABEL

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Cuando el Anillo Cayó al Polvo