El Ángel Guardián a Mi Lado romance Capítulo 14

Jacobo aceptó y se dirigió al lugar. Al llegar al reservado, apenas se sentó, notó que sus amigos lo miraron con una expresión de simpatía.

"Jacobo, sabemos que debes estar sintiéndote mal, pero, ¿qué se puede hacer? Después de todo, él es tu tío. Intenta verlo por el lado bueno."

"Exacto, Jacobo, el Sr. Morillo no es alguien a quien podamos enfrentarnos, aunque estamos molestos por ti, no hay mucho que hacer."

"¡Ánimo, Jacobo!"

"Vamos, toma algo para beber."

"De todos modos, no te gustaba tanto Regina, así que es una buena oportunidad. Ahora puedes casarte con Vanesa Chavira."

"Aunque Vanesa no se compara con Regina en muchos aspectos, ¡ella es tu verdadero amor!"

Sus amigos intentaban consolarlo uno tras otro.

Jacobo, que inicialmente se había sentado con la intención de comer, tomó los cubiertos y los miró confundido. "¿De qué están hablando? Ya me casé con Regina."

"¿Estás confundido?" Fabián tocó la frente de Jacobo. "¿Cómo que ya te casaste con Regina? Ella se casó con Demian, incluso publicaron el certificado de matrimonio. ¡Mi hermano vio el anuncio que Demian publicó en las redes!"

"Es increíble que Regina lograra mantenerlo en secreto hasta revelarlo de una manera tan impresionante."

"Definitivamente, cuando Regina se acercó a Jacobo, en realidad estaba buscando acercarse a Demian. ¡Qué astuta!"

El grupo de amigos comenzaron a comentar entre ellos, pero Jacobo todavía estaba confundido y no entendía de qué estaban hablando.

"¿Cómo podría Regina casarse con mi tío? ¿Qué estás diciendo? Mi tío jamás se casaría con Regina, ¡ellos son de mundos diferentes!" Jacobo encontró la idea absurda.

Después de todo, ¿qué posición ocupaba su tío? Era el líder de la familia Báez, con todo el poder e influencia a su disposición, era lo suficientemente poderoso como para que casi nadie en Clarosol se atreviera a desafiarlo.

Regina y Demian... eran imposibles.

Incluso si ella quisiera acercarse a su tío, ¿él se fijaría en ella?

Su tío, tan distante y elevado, casi como un dios, ¿se fijaría en una mujer que a él ni siquiera le importaba?

¡Qué absurdo!