El Ángel Guardián a Mi Lado romance Capítulo 4

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Por eso, ella creía en Demian.

Demian le había dicho que le debía una vida, y que podía pedirle lo que quisiera. A pesar de que nadie más que ellos dos sabían sobre ese favor, él quería ayudarla.-

Por lo que, después de su renacimiento, fue a buscar a Demian y le dijo, "Ayúdame, por favor."

Luego, le contó su plan: dado que Jacobo no se casaría con ella y la boda no podía cancelarse, entonces se casaría con un hombre aún más impresionante que él.

Demian aceptó su petición.

Luego, logró convencer al abuelo de Demian. Ignacio siempre la había consentido mucho, de hecho, fue ella quien inicialmente le insistió, para que organizara su boda con Jacobo. Ahora quería casarse con Demian, y ni el abuelo ni él se opusieron.

"¿Estás segura?" Demian se levantó, vestido con un traje bien cortado que resaltaba su figura, su altura cercana a los uno noventa, hombros anchos y cintura estrecha, resaltaban su presencia imponente.

"Sí." Regina asintió.

En realidad, estaba un poco nerviosa. Había salvado a Demian una vez, por lo que él le dijo que le debía su vida.

Demian era una persona muy respetada por muchos, siendo aún muy joven, era el líder de la familia Báez y manejaba todo el conglomerado. En todo Clarosol, nadie se atrevía a molestarlo.

Cuando propuso la idea de convertirlo en su novio, en realidad no estaba segura, no esperaba que aceptara, y mucho menos esperaba que el abuelo organizara todo por ella. Después de todo, Demian era el tío de Jacobo.

Que su boda con Jacobo se convirtiera en su boda con él, seguramente sería motivo de chismes y burlas. Pero, Demian dijo que no importaba, que nadie se atrevería a hablar mal de él.

El hombre se acercó a ella y extendió su brazo. "Vamos."

Regina tardó un momento en darse cuenta de que Demian quería que ella enlazara su brazo con el de él. Sin embargo, lo tomó y llegaron a la entrada del salón de banquetes juntos.