Él Eligió a Otra, Yo Elegí a Su Hermano romance Capítulo 656

Solo Chiara sabía lo del asunto de Sofía; ella no lo halagaba a ciegas y por eso Diego sentía que era valiente y confiaba en ella. Las mujeres manejan las cosas con más detalle que los hombres, mientras que Nicolás era solo un idiota. Además, algo tan vergonzoso no necesitaba ser conocido por muchos.

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Cuando llegó a la villa, Lucía ya estaba dormida. A Diego no le gustaba tener mucha gente en casa, así que el lugar estaba vacío y silencioso. Volteó a ver el sofá por instinto, pero quitó la vista y, como siempre, fue al estudio un momento. No había cenado y el hambre empezaba a molestarle; podría haber llamado a Lucía, pero no quiso hacerlo. En el fondo, lo que más quería era que la Sofía de antes hubiera salido de la habitación para prepararle algo de comer.

Le dolía el estómago y su cara se ponía cada vez más seria. Se quedó así, aguantando el hambre, bebió un poco de agua y se preparó para irse a descansar. Sin embargo, como guiado por un impulso extraño, terminó caminando hacia la habitación más alejada de la suya: la de invitados, donde dormía Sofía. Que ella fuera Sun, sin duda lo afectaba, de lo contrario, no habría entrado ahí. Desde que ella se fue de esa villa, él solo había entrado una vez durante el tiempo de espera del divorcio; después de eso, nunca más.

Ese día, de repente, quiso verla. Abrió la puerta; el aire se sentía fresco porque Lucía la mantenía limpia. Aunque la villa era suya, esa habitación le resultaba extraña en decoración y atmósfera, pues en esa casa había muchos rincones desconocidos y detalles que él nunca había mirado. El tocador también servía de escritorio; sus dedos pasaron por la superficie, que estaba impecable, sin una mota de polvo.