Él Eligió a Otra, Yo Elegí a Su Hermano romance Capítulo 99

—Esto es una hipótesis, en la realidad esto no se cumple para nada. Así que, no me vengas con la situación real para refutarme; solo tengo mucha curiosidad de tu opinión. Ah, y también hay que excluir su relación con Diego. Supongamos que no tienen ningún parentesco de sangre, y que Alejandro te gusta, ¿cómo harías?

Imaginar cosas desligadas de la realidad eran puras fantasías. A Sofía no le gustaban esos jueguitos hipotéticos. Pero para conversar con una amiga, no le importaba. Así que lo pensó seriamente.

—Primero, que Alejandro me guste; segundo, que no tenga parentesco de sangre con Diego. Bajo esas dos condiciones, pocas personas lo rechazarían, ¿verdad? Después de todo, él es guapo, tiene dinero y buen físico. Esas ventajas son suficientes para que las mujeres nos sintamos felices.

Carmen preguntó:

—Entonces, ¿cuál es tu respuesta?

—Las ideas de las personas cambian con sus experiencias, Carmen. Después de vivir este matrimonio fallido con Diego, ¿sabes cuál es mi mayor cambio?

—¿Tu visión del amor?

—Exacto, mi visión del amor cambió. Con amigos me relaciono con normalidad: tú me tratas bien, yo te trato bien, nos confiamos mutuamente. Pero en cuanto al amor, seré una egoísta muy firme.

También añadió:

—Incluso si en el futuro tengo una relación amorosa, esa persona debe amarme, consentirme, cuidarme; debe ponerme a mí primero. Si no lo hace desde el corazón, no lo consideraría. Así que, me preguntas si, bajo esas dos condiciones, estaría con Alejandro. La respuesta es simple: no lo haría.

Luego dijo:

—Aunque no hemos convivido mucho, por mi juicio actual, incluso si Alejandro me gustara, ¿crees que podría ponerme primero en todo y tenerme en su corazón?

En la mente de Carmen pasó la mirada fría de Alejandro.

—... Simplemente no puedo imaginarlo.

—¿Verdad? Él no puede hacer lo que yo quiero. Por muy bueno que sea, para mí no sirve de nada; así que no lo elegiría. Antes me enfoqué solo en Diego. Di mucho y al final salí lastimada. Ahora decidí protegerme bien. No permitiré que nadie más me vuelva a hacer daño.

Su amiga no pudo evitar suspirar.

—Sofía, ahora eres increíble. Amarse a una misma es lo más importante.

Ella le dijo:

Al día siguiente iba a jugar tenis con Camilo, Sofía quería invitar a Carmen también. Con la capacidad de su amiga, familiarizarse con ese grupo era cuestión de tiempo. Así podría entrar al círculo de Alejandro, lo que sería algo bueno.

Como tenía que viajar, no se lo mencionó. Después de todo, si fuera, el propósito sería demasiado obvio; apresurarse demasiado tampoco era bueno, mejor que fuera natural.

En el futuro, habría muchas oportunidades de verse en ocasiones apropiadas. Antes de colgar, Carmen añadió:

—Diego y Valentina salieron en las tendencias. Te sugiero que no lo veas.

La comisura de la boca de Sofía se retorció.

—¿Entonces, por qué me lo dices?

Carmen contestó burlonamente:

—Me muero de risa, es mi culpa, es mi culpa. En realidad, son solo un montón de usuarios que no conocen la verdad. Están haciendo un ship de la pareja, elogiando a los dos como si fueran los más enamorados y compatibles del mundo. No te miento, después de verlo, vomité tres veces.