Entrar Via

El increíble papá de los trillizos romance Capítulo 286

La estupefacta Lucy señaló a Fabián y dijo:

—S... Señor Fabián, su nariz...

Sonia soltó una risita y se burló:

—¡Ja, ja, ja! Fabián, ¡nunca te habías comportado así! Supongo que eres un hombre después de todo, ¿no?

Fabián se asustó y se cubrió la nariz mientras se daba la vuelta para retocar su aspecto. Agradeció que Dante no estuviera cerca. De lo contrario, estaría condenado. Quizás él le sacaría los ojos de las órbitas por profanar a Adriana. Mientras tanto, a ella no le molestaba en absoluto la respuesta de él. Miró a su alrededor y se dio cuenta de que Dante no estaba.

—¿Dónde está Dante? —preguntó Sonia con una sonrisa.

—El Señor Licano se dirigió al lugar de celebración con antelación. Me envió a recogerlos. —Fabián miró a otra parte mientras respondía.

—Deberías llevar a Adriana y a su grupo contigo, yo iré con mi propio auto. —Sonia dio la instrucción junto con una sonrisa que indicaba su plan de unir a la pareja.

—E… E…

Sonia subió a su auto y partió antes de que Fabián pudiera detenerla. Como resultado, él invitó a Adriana y Lucy a subir al Rolls-Royce Phantom que estaba estacionado cerca. Cuando subieron, Fabián se sentó en el asiento del copiloto y evitó mirar en dirección a Adriana.

Lucy estaba en vilo debido a la incómoda situación y a lo que le podía deparar a Adriana. Ella estaba tranquila de forma relativa, disfrutando de la escena mientras se dirigían al lugar, no podía esperar a que Sonia lograra su objetivo, para poder conseguir que Dante la dejara cuanto antes.

Entonces podría dejar el Corporativo Divinus y comenzar una nueva vida en otra ciudad con la Señora Fresno y sus hijos a su lado. Como tenía la fortuna que le había dejado su difunto padre, podría llevar una vida despreocupada con sus hijos para el resto de sus vidas.

Adriana tenía todo resuelto en su mente, incluido un plan impecable para mantener su estilo de vida. Pondría una panadería con la Señora Fresno y permitiría a sus hijos saborear los pasteles que se prepararan porque eran grandes aficionados a los pasteles.

Como familia de cinco miembros, pasarían el resto de su vida, viviendo una vida dichosa y sencilla todos juntos. Mientras los pensamientos de Adriana vagaban por todas partes, explorando las innumerables posibilidades después de dejar a Dante, por fin llegaron a la sala de banquetes de Jardín Villa Prosperidad.

Era una noche con viento, en el momento en que Adriana se bajó del auto, la cola de su vestido empezó a ondear debido a la suave brisa. De inmediato, se puso la mano en el vestido para detenerlo. Durante unos segundos, se pareció al aspecto de Marilyn Monroe en una película clásica.

Nuestro precio es solo 1/4 del de otros proveedores

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: El increíble papá de los trillizos