El Secreto de Mi Prometido romance Capítulo 306

Leia El Secreto de Mi Prometido Capítulo 306 - o melhor mangá de 2020

Das histórias de Internet que li, talvez a mais impressionante seja El Secreto de Mi Prometido. A história é boa demais, me deixando com muitas expectativas. Atualmente, o mangá foi traduzido para Capítulo 306 . Vamos agora ler a história El Secreto de Mi Prometido do autor Internet aqui.

Luisa desvió la mirada con cierta incomodidad, fingiendo no haber escuchado nada.

Francisco se frotó la cabeza resignado. —Tía Berta, ya deja de preocuparte por mí.

—¿Cómo no voy a preocuparme? ¿Sabes que hace unos años, cuando no mostrabas interés alguno por las mujeres, tu madre y yo pensamos que quizás te gustaban los chicos? ¡Estábamos desesperadas, pero no nos atrevíamos a preguntarte al respecto...!

Berta no alcanzó a terminar la frase, pues Francisco le tapó la boca de inmediato con una mano. —Cada vez dices cosas más absurdas.

Luisa no pudo contener su carcajada.

Berta se detuvo. —No se preocupe, abogada Luisa, la orientación sexual de Francisco es normal. Tengo que irme por un asunto; ustedes coman tranquilos.

Luisa respondió con mucha cortesía: —Está bien, hasta luego.

—¡Hasta luego, mujer de mi sobrino! —dijo Berta con una sonrisa de oreja a oreja.

Luisa: —...

Después de que Berta se fue, Francisco se disculpó con el rostro lleno de tristeza. —Perdón, abogada Luisa, la tía Berta tiene esa costumbre de hablar sin ningún filtro. No le hagas caso.

—No pasa nada. —Luisa sonrió.— No pensé que el abogado Francisco también estuviera bajo presión para casarse. Creí que alguien tan brillante como tú ya tendría novia o prometida.

Después de escuchar estas palabras, Francisco levantó su mirada hacia Luisa, pero enseguida apartó sus ojos. —Estoy esperando a alguien.

—¿Qué? —Luisa no entendió al principio. Preguntó por instinto, pero pronto cayó en cuenta. —Ah, ya veo.

—Ya es tarde, te llevo a casa. —Francisco se levantó y tomó su abrigo.

—No hace falta.—Luisa también se puso de pie.— Traje mi auto.

—Pero has bebido demasiado. —Le recordó Francisco con amabilidad.

—Ah, cierto. —Dijo Luisa.— No te preocupes, llamaré a un conductor para que me recoja.

Esa misma noche, de hecho, tenía pensado ir a la mansión de la familia González a ver a Violeta.

—Está bien. —Francisco no insistió más sobre este tema.

...

Capítulo 306
 1

Capítulo 306
 2

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: El Secreto de Mi Prometido