Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico romance Capítulo 111

~Scarlett~

—Scar, perdón… —Sebastián se acercó, intentando abrazarme.

—Me importa una mierda tu disculpa —lo frené de golpe, como intentando matarlo solo con la mirada— Ella es una maldita mentirosa, y hoy le toca pagar.

—Scar —Adrián se puso entre nosotros, en posición de protegerme, y me habló bajito— Estás herida. Yo me encargo de Ava Fuller después, pero por ahora...

—Está bien —lo empujé con cuidado— solo me va a tomar un minuto.

Se quedó a mi lado, sin decir nada, pero con esa mirada seria que decía que no se iba a mover de ahí.

—¿Ya los firmaste? —le señalé la carpeta a Sebastián— Dámela.

Él dudó por un segundo, se notaba que no quería.

Sentí que todo se me encendía por dentro. Respiré hondo para no explotar ahí mismo.

—Me voy a quedar, ¿entendiste? Así que dame esa puta carpeta.

—Scar, tienes que calmarte... —empezó, pero se calló cuando lo miré directo a los ojos. No sé si estaba llorando sangre, pero todo lo veía rojo.

—Usaste esta carpeta para detenerme, Sebastián Knight, y te vas a arrastrar para recuperarla —le arrebaté los papeles— ¡Ahora aléjate!

Él no se movió, así que lo empujé. O más bien, me empujé a mí misma lejos de él, tambaleándome mientras iba directo hacia Ava. Sebastián intentó seguirme, pero Adrián lo detuvo.

Ava estaba entre los brazos de Jack Fuller, temblando como si tuviera miedo de verdad. Esa era la cara que ponía cada vez que lograba hacerse la víctima y meterme en problemas.

Hoy quería ver cómo se le caía la máscara.

—¿Desde cuándo lo sabías? —le pregunté con calma, hasta yo me sorprendí de como sonó.

—Lo siento... —murmuró Ava, abrazando más fuerte a Jack— Estaba enojada... Tú les estabas haciendo daño a mamá y a papá, ¡y lo sabes! ¿No podrías, no sé… tratarlos mejor? Estoy dispuesta a compartir a mis papás contigo, ¡solo deja de hacer todo este... show!

Una actuación perfecta. Si antes tenía dudas de que lo había hecho a propósito, ahora ya no me quedaba ninguna.

—¿Qué pasó? ¿Ya se te acabó el show de angelito inocente? —me reí como loca mientras seguía rompiendo los papeles en pedazos— Querías que me quedara con mi 'familia feliz' y construyera un hogar con mi 'esposo perfecto', ¿no? ¿Por eso dijiste la verdad?

—No... —Ava mirando los pedazos de papel que estaba rompiendo— ¡No! ¡¿Cómo te atreves?! ¡No...él puede firmar otros...!

—Él puede, pero yo no quiero —le lancé los últimos pedazos de papel en la cara. Jack Fuller intentó detenerla, pero ella se lanzó al suelo a recogerlos con desesperación— ¿Los quieres? Ruega por ellos, y tal vez te regalo uno.

Ava cayó de rodillas, recogiendo los pedazos como si valieran oro. Por primera vez en todo el día, vi cómo se le salían las lágrimas de verdad. Sus ojos se pusieron rojos y gritó:

—¡¿Cómo pudiste, malnacida perra?!

—¿Qué? te atreves a hablarme así, a mí? —me burlé, sonriendo de oreja a oreja— ¿Así le hablas a tu hermana? Pensé que querías que me quedara, ¿o ya se te olvidó?

Ava me miró con tanto odio, pero yo se la devolví, al ver que no me importaba como se sintiera miro a Sebastián. Intentando poner su cara de perrito triste, esa carita que siempre usaba para que él corriera a consolarla.

Pero Sebastián no se movió.

—Puedes mirarlo todo lo que quieras —le dije, imitando ese tono venenoso con el que ella me hablaba— Pero quiero que sepas que él va a ser tu cuñado... para siempre.