Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico romance Capítulo 291

Incluso en la cima de su ira, todo lo que Scarlett quería era recuperar lo que le pertenecía y hacer justicia. Por eso, sus ojos se abrieron ligeramente ante las palabras de Scott, asombrada por su tono despreocupado.

Él había perdido a su madre igual que ella, también había sido rechazado por su familia original, pero en lugar de atormentarse a sí mismo, elegía atormentar a todos los que le debían algo mientras seguía con su vida.

—Desearía poder ser tan libre, como tú... —murmuró Scarlett—. ¿Cómo lograste salir adelante, después de perder a tu madre cuando eras un bebé?

Cuando ella se había convertido en tal desastre que no podía aferrarse a nada bueno en su vida

—No podría haberlo hecho sin el señor Vanderbilt. —Scott negó con la cabeza.

El señor Vanderbilt...

Scarlett bajó sus pestañas, ocultando su secreto en su interior.

Scott posó su mirada sombría en Elijah Green, quien socializaba con los invitados no muy lejos de ellos.

—Si él no me hubiera cuidado y educado todos estos años, sé que los Green nunca habrían aceptado de vuelta a un huérfano de bajo nivel, sin importar la sangre que corriera por mis venas.

Scarlett no reconocía al hombre en las palabras de Scott.

¿El hombre había criado a un niño cuya familia de sangre le negó ese derecho? ¿El hombre que fue a visitarla una vez cuando estaba en prisión? ¿El hombre que ni siquiera insistió en recuperar el collar de su difunta esposa?

Quizás la diferencia entre Scott y ella era que él no había sido adoptado por basuras como los Fuller. Lo que Scott decía solo probaba que ella no era querida, ni siquiera por su propio padre.

—Me trató como a su propio hijo —Scott le sonrió suavemente a Scarlett, había una luz fascinante en sus ojos cuando hablaba de su padre adoptivo—. Me enseñó a ver siempre el lado positivo. A tener dignidad, honestidad y bondad. También me enseñó a pagar con la misma moneda...

Scarlett estalló en carcajadas con el último punto.

—¿En serio? ¿Estás seguro de que eso no vino de ti? —Su risa clara disipó una sombra de oscuridad en los ojos de él—. ¡Eso definitivamente no suena como algo relacionado con lo demás!