La Heredera del Poder romance Capítulo 1474

En estos momentos, la única competencia para ellos era la pastilla amarilla.

Gabriela, siendo médica de profesión y con los contactos de Paulina, conseguir una auténtica pastilla amarilla no debería ser un problema.

"Está bien," asintió Paloma y de inmediato mandó a alguien a investigar.

Este asunto no era ningún secreto en la familia Huerta, así que Paloma pudo obtener información rápidamente. "Papá, el diagnóstico de Gabriela es completamente opuesto al de los otros médicos. ¡La familia Huerta ya ha desmantelado la sala estéril! Gabriela también mencionó que la pastilla amarilla no tendría ningún efecto en la enfermedad de Andrés, así que no piensa usarla."

Al oír esto, Fausto suspiró aliviado. "¡Bien! ¡Bien! ¡Eso es excelente! De esta manera, la familia Huerta solo tendrá que prepararse para recoger el cuerpo de Andrés."

Quien mata, paga.

Si Gabriela causaba la muerte de alguien con su tratamiento, ella también tendría que asumir la responsabilidad.

¡Esto para Fausto era matar dos pájaros de un tiro!

...

El tiempo pasó rápidamente.

En un abrir y cerrar de ojos, ya era el tercer día desde que Andrés tomó la medicina, y hoy también era el gran día de la elección del líder.

Desde temprano en la mañana, Rafael estaba al lado de la cama de Andrés, esperando que despertara.

Si Andrés despertaba ese día, significaría que el tratamiento de Gabriela había funcionado.

Entonces, Andrés podría votar tranquilamente por Gabriela en la reunión de elección.

Por el contrario, si él seguía sin despertar, entonces Rafael tendría que considerar votar por Paloma.

Después de todo, la familia Rey tenía la pastilla amarilla.

Pero a medida que pasaban los minutos, Andrés no mostraba señales de despertar.

Rafael estaba muy ansioso y con la voz ronca dijo: "Andrés, abre los ojos y mira a papá, solo una vez, ¿puedes hacerlo?"

Andrés en la cama no respondió.

En ese momento, la Sra. Huerta entró en la habitación. "Rafael, ¿no tienes una reunión hoy? Ve a la reunión, yo me quedo en casa cuidando de Andrés. Si hay alguna novedad, te aviso inmediatamente."

Rafael asintió con la cabeza. "Entonces iré a la reunión."

"Ve."

Después de llegar al consorcio, Rafael llamó a la Sra. Huerta. "¿Cómo está? ¿Andrés ya ha despertado?"

"Aún no." Del otro lado del teléfono se escuchó el suspiro de la Sra. Huerta.

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