La Heredera del Poder romance Capítulo 1549

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Alma conocía a Gabriela a través de su hermana, María Jaso, ya que ambas habían sido compañeras de secundaria. Gabriela, desde aquella época, ya tenía fama de ser problemática. Cuando llegó el momento de pasar a la preparatoria, y tras no pasar el examen de admisión, su familia pagó para que ella pudiera ingresar a la Escuela Secundaria Puente Norte. Sin embargo, para Alma, eso no cambiaba el hecho de que Gabriela no llegaría lejos.

Con el tiempo, la familia Jaso se mudó a Ciudad Real y Alma dejó de tener noticias de Gabriela. Pasó el tiempo y, cuando volvió a saber de ella, Gabriela había pasado de ser la distinguida señorita Muñoz a ser despreciada por todos como una impostora que había usurpado la vida de la verdadera heredera durante dieciocho años. Por eso, Alma nunca había tenido una buena impresión de Gabriela.

Ella nunca imaginó que se encontraría con Gabriela en el departamento técnico de la policía.

¿Qué fue exactamente lo que el oficial Lazcano mencionó cuando presentó a Gabriela, ? ¿Una experta en informática enviada por las autoridades superiores?

Al ver la reacción de Alma, el oficial Lazcano preguntó: "Alma, ¿ustedes se conocen?"

Recobrando la compostura, Alma sonrió y extendió su mano hacia Gabriela. "Señorita Yllescas, mucho gusto. Soy Alma Jaso."

"Gabriela Yllescas." Respondió Gabriela, estrechando la mano de Alma.

Tras las presentaciones, Gabriela se inclinó hacia adelante, se sentó y fue directo al grano. "¿Entre qué horas desaparecieron las grabaciones del monitor?"

El oficial Lazcano miró hacia Alma.

Con un leve tono sarcástico en la mirada, Alma respondió: "De las ocho y diez a las nueve."

Estaba curiosa por ver si Gabriela realmente podría recuperar las grabaciones.

"Entendido."

Gabriela empezó a teclear con una velocidad asombrosa, con una mano en el teclado y la otra en el ratón, creando un chasquido constante en el ambiente. Sus manos dejaban un rastro de movimiento tan rápido que parecían desvanecerse.

El contraste entre sus manos y el teclado era impactante.

El oficial Lazcano, que no sabía mucho de computadoras, estaba asombrado al ver a Gabriela teclear sin siquiera mirar el teclado. "¿Esto se llama teclear a ciegas, verdad? ¡Es increíblemente rápido! ¿Cuántos años de práctica se necesitan para esto?"

El oficial Lazcano, quien usualmente no utilizaba computadoras y le tomaba un tiempo encontrar una sola letra en el teclado, estaba impresionado. A diferencia de él, Gabriela usaba todos sus dedos y tecleaba a una velocidad que era difícil de seguir incluso para los profesionales.

"Sí, es bastante rápida," dijo Alma, parándose detrás de Gabriela con las cejas ligeramente fruncidas, y luego añadió: "Pero, ¿realmente podrá recuperar las grabaciones de esta manera?"

En el mundo de la informática, los expertos apreciaban la técnica, mientras que los novatos disfrutaban del espectáculo.

Para el oficial Lazcano, que no entendía de computadoras, la rapidez con la que Gabriela usaba el tecleado era impresionante.