La Heredera del Poder romance Capítulo 288

Después del almuerzo, Sofía y Sergio se ocuparon con sus asuntos.

En casa quedó sola Gabriela.

Gabriela se sentó ante su escritorio, inclinada sobre su trabajo, completamente absorta. La luz del sol accedía por la ventana y bañaba su rostro con un halo suave.

Fue entonces cuando el timbre resonó en el aire.

Gabriela cogió un libro al azar y lo usó para cubrir el dibujo que había estado realizando, y se dirigió a abrir la puerta.

Al abrir, no había nadie afuera.

Gabriela frunció el ceño ligeramente.

¿Acaso había perdido la cabeza dibujando tanto?

¿Había oído cosas que no estaban allí?

"¿Quién es? ¿Hay alguien ahí?"

No hubo respuesta.

Justo cuando Gabriela estaba a punto de cerrar la puerta, una figura saltó desde la esquina, exclamando "¡Sorpresa!"

Gabriela miró sorprendida a la recién llegada, "¿Abuela Zesati?"

"Gabi," la abuela Zesati se acercó trotando, intentando darle un abrazo efusivo a Gabriela.

Pero justo antes de llegar a su lado, se resbaló y casi se cae al suelo. Gabriela, rápida de reflejos, la sostuvo, "¡Ten cuidado!"

"¡Qué agilidad tienes, Gabi!" la abuela Zesati aprovechó para darle un abrazo.

¡No en vano era su nieta política favorita!

Gabriela, por costumbre, se tocó la nariz, "Bueno, soy la tercera mejor del mundo."

"¿Qué tercera mejor?" la abuela Zesati dijo con seriedad, "¡Eres la número uno! ¡La mejor!"

Gabriela, halagada por la abuela Zesati, se sintió algo avergonzada y la llevó hacia la sala.

"Abuela Zesati, ¿tiene frío? ¿Quiere que la prepare un té con leche?" Aunque ya era principios de primavera, había habido un frío repentino en los últimos días, y aún hacía algo de frío afuera.

"Gabi, ¿sabes preparar té con leche?" preguntó la abuela Zesati, sorprendida.

Gabriela asintió.

"¡Eres increíble, Gabi!"

¡Una Gabi tan impresionante aseguraría que su bisnieto sería un genio!

Hermoso y brillante.

¡Su bisnieto sería la envidia de todos!

La abuela Zesati se emocionó cada vez más con la idea, casi como si ya pudiera ver a su adorable bisnieto.

Gabriela fue a la cocina para preparar el té con leche para la abuela Zesati.

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