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Senha: La Heredera Divorciada Billonaria Capítulo 1591 Me encargaré de ti más tarde
Nicole se mordió el labio inferior hasta que se tornó brillante y rojo. Ella parecía volverse más enérgica cuando se enojaba.
Ya no sabía qué más decir así que se dio la vuelta para irse, avergonzada e indignada.
Sin embargo, de repente le tiraron de la muñeca.
Clayton se rio en voz baja. Su corazón se derritió hasta convertirse en un charco al ver su rostro tímido.
Sabía que ella estaba enojada, así que habló con una sonrisa, pero con un tono un poco agraviado: “Fue mi culpa. Fui muy grosero, Señorita Stanton. Esta condición fue un poco atrevida. Dijiste que podía tener todo lo que deseara. Si lo hubiera sabido, te habría dicho que me dieras un libreto para poder decir lo que querías que dijera…”.
Ella estaba furiosa. Clayton era el que tenía pensamientos sucios, ¿y aún así intentaba culparla a ella?
Se liberó bruscamente y lo apartó con decisión.
“Dijiste…”.
Antes de que ella pudiera terminar, el rostro de Clayton se puso pálido por un momento. Soltó la mano que la sujetaba y se agarró el pecho.
Ella se puso pálida del susto y se apresuró a acercarse.
“¿Qué pasa? No me asustes. ¿Te toqué la herida? ¡Voy a llamar al doctor!”.
En pocos segundos, sus manos le sudaban de miedo.
Él acababa de recuperarse y no podía permitirse ningún accidente.
Justo cuando ella estaba a punto de pulsar el timbre de llamada a un lado, la mano de Clayton le sujetó de repente la muñeca. La miró fijamente.
“Mientras no te enojes más conmigo, mis heridas se mejorarán al instante”.
Nicole se quedó atónita durante unos segundos antes de reaccionar.
“¡Me mentiste!”.
¡Estaba realmente furiosa!
Clayton había estado hospitalizado y finalmente despertó, pero la tomaba como objeto de burla una y otra vez. Ella estaba a punto de morir de rabia.
Nicole quería apartarlo, pero cuando recordó que su cara pálida de antes no parecía ser falsa, sus manos perdieron la fuerza y simplemente le tocó suavemente el hombro.
Sin embargo, su rostro seguía siendo frío, y ella se quedó inmóvil.
“Me parece que estás bastante bien. Creo que ni siquiera necesitas tomar medicina”.
Clayton la miró con una sonrisa en los ojos.
“¿En serio estás enojada? Te pediré disculpas, ¿está bien?”.
Nicole se quedó en silencio.
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