La Traición en Vísperas de la Boda romance Capítulo 111

Las palabras de Penélope cayeron como un trueno en cielo despejado, explotando en la mente de todos los presentes.

Las miradas, cargadas de curiosidad y un dejo de desconfianza, se posaron sobre Petra. Los ojos de la gente tenían esa chispa de morbo, como si buscaran alguna señal que confirmara lo que Penélope acababa de soltar.

—Si no me creen, más tarde puedo mandarles el video para que vean con sus propios ojos cómo se comporta ella cuando está debajo de un hombre, para que vean lo que en verdad es —remató Penélope, sin el mínimo asomo de vergüenza.

A estas alturas, ya nada le importaba. Lo dicho, dicho estaba.

—Joaquín, ella está aprovechando que todos los invitados están aquí para exhibirte. Si hoy dejas que te manipule, mañana va a hacer contigo lo que quiera. Te va a pisotear, y…

Penélope no terminó la frase. Joaquín se dio la vuelta de golpe y, de un tirón, jaló a Renata, que se escondía tras los primos de la familia Velasco.

—¿Fuiste tú quien mandó a mi mamá a buscar a Simón?

Su mirada era tan dura que cualquiera habría sentido que le atravesaba el alma.

Renata negó con la cabeza, nerviosa, casi suplicando.

—Yo no fui.

—¡Joaquín, suéltame! ¡Tengo a tu hijo en mi vientre! ¡No puedes tratarme así!

Renata buscó refugio detrás del grupo de la familia Velasco.

Penélope, temerosa de que Joaquín lastimara al bebé, se interpuso rápidamente.

—¡Joaquín, estás loco! ¿Por una mujer que ya está más que usada vas a tratar así a Renata? ¡Recuerda que ella lleva en su vientre al primer nieto de nuestra familia!

Gracias a la intervención de Penélope, Renata logró zafarse. Pero cuando intentó huir, sintió un tirón en el cuero cabelludo: Joaquín le había agarrado el cabello y la obligó a inclinarse hacia atrás.

Penélope, desesperada, intentó abrir los dedos de Joaquín.

Pero su fuerza no se comparaba con la de él. En un instante, Joaquín la apartó de un empujón.

Al notar que la gente cuchicheaba a su alrededor, cambió de táctica y empezó a lanzar lodo sobre Petra.

—No se dejen engañar por su carita. Sí, nuestra familia tiene su escándalo, pero esta mujer tampoco es ninguna santa. ¡Ayer mismo estuvo con varios hombres! No es la primera vez que sale a buscar hombres. ¡Tengo videos que lo prueban!

El murmullo creció entre los invitados.

—Aquí todos hacen lo que quieren fuera del matrimonio. El problema es hacer el escándalo público, eso sí es pasarse.

—Exacto. Si tú también andas de fiesta afuera, ¿con qué cara le pides fidelidad a tu esposo?

...

[En redes sociales: “¿Alguien sabe qué está pasando en la fiesta de los Velasco? El chisme está buenísimo, hasta videos prometieron.”]

[Comentario: “Ni en las telenovelas se ve tanto drama, esto sí se salió de control.”]