La Traición en Vísperas de la Boda romance Capítulo 265

Cuando Petra dejó el celular y se topó con la mirada inquisitiva de Benjamín, sintió cómo el corazón se le desbocaba en el pecho. Su expresión se volvió un tanto forzada, como si intentara disimular esa incomodidad que no podía controlar.

—Belinda dijo que tenía un asunto pendiente, así que se fue antes. Mejor comamos.

Benjamín asintió con una mueca y ni se inmutó, como si ya lo hubiera previsto.

Después de la comida, él se ofreció a llevarla de regreso a la casa de la familia Calvo.

Aparcó el carro justo frente a la entrada. En cuanto Petra abrió la puerta para bajar, él le sujetó la muñeca con firmeza.

—Mañana temprano paso por ti para ir a la casa de la familia Ruiz.

Petra estaba a punto de negarse, pero él la soltó de inmediato y añadió con voz grave, sin apartar la mirada:

—Antes de rechazarme, piensa en las consecuencias de hacerme enojar.

Petra captó la amenaza oculta. Tragó saliva y solo le quedó asentir, resignada.

—Está bien, nos vemos mañana temprano.

Benjamín volvió a asentir. La dureza en su rostro se suavizó apenas.

Petra salió del carro, inclinándose levemente. Cerró la puerta y, antes de irse, se volvió hacia él, usando ese tono educado que reservaba para los extraños.

—Gracias, señor Benjamín, por traerme. Que tenga cuidado de regreso.

Benjamín la observó por unos segundos, luego asintió. Antes de pisar el acelerador y alejarse, lanzó una frase que la dejó helada.

—Creo que ya descubrí por qué el Grupo Calvo terminó en este desastre.

Petra dio un paso hacia el carro, apurada.

—¿Por qué lo dices? ¿Cuál es la razón?

Benjamín la miró directo a los ojos, con una sonrisa torcida en los labios.

—Parece que te gastaste toda la inteligencia en cambiarte la cara.

Dicho esto, arrancó el carro y se fue a toda velocidad, dejando a Petra a merced del humo del escape.

Ella se quedó allí, con la mandíbula apretada, sintiendo que la rabia le quemaba la garganta.

—¡Maldito! —murmuró para sí, deseando poder arrojarle una piedra.

En ese momento, la voz de Giselle se escuchó detrás de ella.