Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1082

"No es... yo... ellos..."

El hombre que causaba problemas ya estaba completamente perdido, tartamudeando sin poder formular una frase completa, buscando ayuda desesperadamente entre la multitud con una mirada ansiosa.

Oculto entre la gente, Otto intentaba aprovechar la confusión para irse a escondidas.

Dorian lo vio y lo llamó: "Sr. Samper, ¿no que se quedaría a ver el espectáculo? ¿Por qué la prisa por irse?"

Habló con una voz lo suficientemente alta, grave y serena, atrayendo inmediatamente la atención de todos hacia Otto.

Otto no mostró signos de pánico, simplemente sonrió levemente y dijo: "Es que ya no hay espectáculo que ver. Alguien ha estado difamando maliciosamente la reputación de el Hotel Esencia, pero no puede presentar ninguna prueba. Pensé que iba a haber algo grande para ver, pero resulta que no hay nada interesante. Mejor regreso a mi habitación a dormir una siesta que perder el tiempo aquí."

El rostro del joven que causaba problemas se puso pálido, justo cuando estaba a punto de hablar, Otto le lanzó una mirada y de inmediato cerró la boca.

Dorian observó la interacción entre los dos con una sonrisa fría en sus labios, sin decir nada.

Alguien capaz de limpiar tan eficientemente los proyectos del resort de estilo tradicional para Fabiana y Enrique no era un personaje sencillo.

Venía preparado para esta ocasión.

No había duda en la mente de Dorian de que el joven problemático había sido instigado por él.

El joven, que parecía tener alrededor de treinta años, mostraba a través de sus ásperos dedos ser de una familia relativamente pobre.

Para que estuviera dispuesto a causar problemas en público y no acusar a Otto, este último debió haberle ofrecido una garantía financiera suficientemente tentadora, incluyendo una compensación por si era encarcelado por difamación.

El hombre problemático se puso aún más pálido, pero no dijo nada más.

"Esta conferencia de prensa concluye aquí," dijo Dorian, "el Grupo Esencia publicará los resultados de la investigación y las pruebas después de la conferencia. Tomaremos medidas severas contra los implicados y gestionaremos estrictamente para prevenir que situaciones similares se repitan. También pedimos a todos que nos supervisen. Gracias."

Después de hacer una reverencia, Dorian devolvió el micrófono al periodista y se abrió paso entre la multitud, bajando rápidamente por las escaleras.

Se movía muy rápido, llamando a Amelia mientras caminaba.

La voz débil de Amelia al otro lado del teléfono antes de la conferencia de prensa seguía resonando en su mente; la conferencia que esperaba terminar en media hora se había alargado por las interrupciones del hombre problemático.

El teléfono de Amelia estaba activo, pero nadie respondió.