Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1223

Amelia se sintió un poco asustada de repente, y no se atrevió a luchar. Sus grandes ojos estaban abiertos, miraba a Dorian con cautela.

Sus ojos siempre fueron húmedos, y al abrirlos bien, se llenaban de un brillo parecido al de los ojos de un cervatillo, limpios y transparentes, mostrando una inocencia y desamparo que causaban ternura.

Dorian solo le echó un vistazo a esos ojos, y la severidad que lo envolvía se disipó sin querer. La fuerza con la que sujetaba sus piernas también disminuyó, aunque no se levantó, y sus manos seguían firmemente entrelazadas con las de ella.

Sus ojos oscuros descansaron en su rostro, y la mirada profunda e insondable la hizo contener el aliento. Sus ojos húmedos lo miraban con nerviosismo.

"Amelia," Dorian finalmente habló, "no quiero odiarte, tampoco quiero obligarte, así que no me obligues a mí."

"Yo no te estoy obligando..."

La voz de Amelia sonaba débil y temblorosa por la tensión, e incluso llevaba un tono de injusticia que ella misma no había notado. "Solo quiero ir a ver a Frida, estar con ella. Antes, cuando estaba en mi momento más difícil, ella viajó desde lejos para estar conmigo, pero ahora que ella está pasando por un mal momento, no estoy a su lado, yo..."

Amelia imaginó a Frida siendo obligada a irse sola, y su voz se quebró sin control.

Aspiró por la nariz, tratando de suprimir el nudo que se formaba en su garganta.

La mirada de Dorian se tornó complicada por un momento.

Esa frase de "en mi momento más difícil" desmoronó toda su dureza.

Si no fuera por él, ella no habría pasado por ese periodo tan difícil.

Incluso, si en su momento él no hubiera insistido en asegurar que ella era Amanda Sabín, Eduardo Ferrer y Cintia Ferrer no habrían seguido a la familia Sabín a Zúrich, no la habrían humillado, y ella no habría decidido terminar su relación con él yendo al hospital para interrumpir su embarazo, lo cual él interpretó como que realmente había perdido al bebé.

O si en ese entonces él hubiera sido más cuidadoso y hubiera descubierto antes que Amelia había decidido tener al bebé, ella no habría tenido que enfrentar el embarazo y la crianza sola.

Dorian aflojó un poco el agarre sobre las manos de Amelia.