Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 923

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Lorenzo se mordía los labios sin hablar.

Manuel no pudo evitar darle un fuerte golpe en el hombro con su bastón: "¿Me escuchaste?"

Petra rápidamente se acercó y tiró de la manga de Lorenzo, señalándole que debía responderle a su abuelo.

Lorenzo miró a Manuel, cuyo rostro se tornaba cada vez más verde de la ira, y finalmente asintió: "Ya entiendo."

"Piensa bien cómo vas a hacer para traer a tu hermana de vuelta." Manuel seguía enojado. "Con lo difícil que es que vuelva a casa, y ustedes..."

Cada vez que Manuel mencionaba el tema, se enfurecía. Ya era bastante difícil encontrar una oportunidad para que Amelia visitara la casa, y justo cuando su abuela logró llevarla, no tuvieron chance de sentarse a disfrutar de una comida en familia sin que alguien lo estropeara.

Petra también se arrepentía, lamentando haber seguido los consejos de Cintia.

"Fue mi culpa por no decidirme." Petra se disculpó en voz baja. "Debí haberlas invitado a quedarse a comer primero, y luego verificar con calma si ella era realmente Amelia, no sé qué me pasó..." Petra no pudo continuar.

Óscar también estaba molesto y no dijo nada. No sabía cómo disculparse, pero su frustración era evidente, y al igual que Petra, apenas ahora estaba empezando a darse cuenta.

"Esa Cintia no es buena persona." Manuel golpeó el suelo con su bastón haciendo eco. "Viendo cómo es de dos caras, quién sabe cuántos obstáculos le puso a Amelia cuando se casó con ellos. De ahora en adelante, menos trato con esa clase de gente. ¿Entendido?"

Petra vaciló. Después de todo, ella y Cintia habían sido amigas por veinte años.

Nunca había visto a Cintia tratar mal a Amelia. Siempre se mostró elegante y culta frente a ellas, y cuando venía a quejarse de su nuera, lo hacía con argumentos sólidos, igual que cuando sugirió la prueba de ADN, pareciendo completamente razonable, por lo que Petra no conocía esa otra cara de Cintia.

Manuel, viendo que no respondían, elevó la voz: "¿Me escucharon?"

Petra volvió en sí y asintió con la cabeza: "Entendido."

Óscar también respondió suavemente: "Entendido."