Una curvy para el Alfa romance Capítulo 141

—¿Janet?— dice él y siento como ella está atrás de mí sujetándome.

—Lo siento hermano… la necesito— dice ella y vacía un envase de gas en la cara de David, quien se va debilitando hasta caer de rodillas.

—No Janet… no hagas esto…— dice él antes de caer desmayado. Yo no puedo creer lo que sucede.

—¡David! ¡No!— grito mientras ella me jala, sin duda es más fuerte que yo.

—Hermano… siempre fiel a Sebastián, ese ha sido tu gran problema—

—¿Qué has hecho con él?— pregunto angustiada.

—No te preocupes humana… no lo he matado, es mi hermano a fin de cuentas. Pero ni él ni nadie se va a meter en mis planes. Solo estará dormido por un tiempo— dice.

—¡Suéltame! ¡Déjame!— grito, intentando zafarme cuando ella tapa mi boca y pierdo la conciencia.

Cuando me despierto… no tengo idea de cuanto tiempo ha pasado, pero el lugar donde estoy… me parece muy conocido.

La casa de la manada.

Había estado tantos años sin estar aquí, y justo estaba en una parte que conocía muy bien, la cocina, donde trabajan las omegas.

—Por fin despiertas…— dice Janet y parece molesta.

—¿Qué hago aquí?— pregunto cuando ella me tapa la boca, y me arrastra moviéndome a otro lugar, parece ser una especie de pasillo, escondido entre las habitaciones.

Hay una ventana de donde se escucha un alboroto. De repente la veo bien a la cara y veo que tiene la marca de un golpe, debe haber sido muy fuerte para que no haya sanado.

—¿Por qué me trajiste hasta aquí? ¿Cuánto tiempo ha pasado?—

—Unas cuantas horas, ya es completamente de noche, eres bastante dormilona y floja. Estos eran los pasadizos que usaban los alfas hace años para espiar. Mi padre me los enseñó, nadie viene aquí nunca, mucho menos tú lo sabrías— dice ella de forma despectiva viéndome.

—Y te traje aquí porque cumplí con lo que te dije, quería que vieras la verdad…— dice ella y ahora entiendo, ya lo sospechaba.

—Tú eres la del mensaje… ¿Dónde está Luna Nancy?— pregunto ajetreada y ella me hace señas de que hable bajo.

—Si era yo … mi idea era traerte aquí y destruirte… pero me di cuenta de que no iba a ser tan fácil— dice y me toma por el cuello, apretando sobre mi marca.

—El tonto de Sebastián te marcó ¿Cómo pudo haber sido tan estúpido? ¡Además, se siente la fuerza de la luna en ti!— dice furiosa y me suelta.

Capítulo 0141 1

Capítulo 0141 2

Capítulo 0141 3

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: Una curvy para el Alfa