Una curvy para el Alfa romance Capítulo 167

Resumo de Capítulo 0167: Una curvy para el Alfa

Resumo do capítulo Capítulo 0167 de Una curvy para el Alfa

Neste capítulo de destaque do romance Hombre-lobo Una curvy para el Alfa, GoodNovel apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.

—Créeme Mariela, que ese miedo siempre va a existir, pero... Henry es de los guerreros más fuertes que he visto en mi vida y ahora tiene por qué luchar. Te tiene a ti y eso le dará mucha más fuerza— digo.

—Yo haría lo que fuera por mi mate…— dice y yo creo que es imposible quererla más.

—Pasa tiempo con él... todo el que puedas — le digo.

En poco tiempo todo está preparado y la gente del pueblo se queda armada con wolfsbane, balas y toda la protección posible para que si son atacados tengan como protegerse.

Esa tarde me quedo pensando en mi propio mate, ¿estará bien? ¿Qué le habrán hecho? ¿Cuáles son los planes que tiene Marco? Nate estaba vivo, pero sentía que estaba sufriendo, yo intentaba ser fuerte por ambos, al menos aquí podía actuar.

Cuando de repente, sentí un dolor grande en el pecho y pensé que me moría. Casi me caigo y me sostuve como pude, mientras jadeaba, arrodillada.

No pude dormir y cuando atardecía sabía que tenía que prepararme para salir, una vez más de vuelta a la manada. Ya no obligada, sino por mi propia voluntad.

Teníamos autos preparados y veía que todo se despedían, los rogues con sus mates humanos, los guerreros de Xavier preparados, los humanos en autos, incluida yo.

Llevábamos una gran reserva de wolfsbane, armas y escudos, aunque eso no garantizaba nada. Jamás escuché de humanos peleando con lobos, y las estadísticas no estaban de nuestro lado.

Miraba hacia una de las entradas del pueblo, prácticamente rogando que apareciera Fabrizio, pero fuera lo que fuera que estuviera haciendo el vampiro, aún no regresaba. Sabía que si pudiera, lo haría.

—Vuelve a mí... te lo ruego— decía Mariela llorando, mientras abrazaba y besaba a Henry. Él parecía un gigante y ella pequeñita en sus brazos.

—Vendré así sea arrastrándome... mi pequeña mate— respondía y la besaba apasionadamente. Yo la veía llorando y noté en su cuello una marca, y mientras veía a Henry que parecía más fuerte.

—Juro que si no los conociera ya... creería que esa especie es barbárica— decía Gaby, imaginándose lo que había pasado al ver el cuello de Mariela. Se había unido a ella, y él la había marcado, yo sabía que mi amiga lo había hecho también para hacerlo más poderoso.

Yo miré al pueblo y me despedí mentalmente, temía no volver, pero temía aún más perder a mi Alfa.

—Luna…—

—Tengo que ir... tengo que entrar como una más. No soy la humana débil que todos creen— le digo y él asiente. El poder de una luna no es igual a la de un Alfa, pero eso no quiere decir que sea menor.

Veo guerreros viniendo a atacarnos y son reprimidos con ferocidad por los rogues de Joana. Son acabados en segundos, pero solo han sido los primeros. Escucho aullidos a lo lejos, sé que todos están alerta, que se acerca un ataque.

Y desde el momento en que pongo un pie en la manada, en el territorio, mi territorio... me siento diferente. El aire cambia, y veo que a los lobos se les eriza el pelaje, escucho más aullido a lo lejos que vienen del bosque... y no me siento sola, ni en desventaja.

Ya no soy la chica que apareció en el bosque, la humana huérfana de la que todos se reían, la débil se dejaba patear, la que fue exiliada de la manada. Preparaba mi arma con wolfsbane y agudizaba mi mirada.

Yo era la Luna de Medianoche, por derecho propio.

—Mi mate voy por ti—

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: Una curvy para el Alfa