Una curvy para el Alfa romance Capítulo 59

Resumo de Capítulo 0059: Una curvy para el Alfa

Resumo do capítulo Capítulo 0059 do livro Una curvy para el Alfa de GoodNovel

Descubra os acontecimentos mais importantes de Capítulo 0059, um capítulo repleto de surpresas no consagrado romance Una curvy para el Alfa. Com a escrita envolvente de GoodNovel, esta obra-prima do gênero Hombre-lobo continua a emocionar e surpreender a cada página.

El beso continúa, y él me lleva recostándome de una mesita en la entrada. Sebastián es salvaje, rompiendo mi camisa, levantando mi falda mientras yo lo toco. Su mano va directamente a mis piernas y lo veo sonreír al recordar que no tengo nada debajo.

—Estás tan preparada… ¿Estuviste pensando en mí… mi mate?— pregunta y no me deja ni responder cuando muerde mi boca, afortunadamente, porque me da vergüenza decir que sí. Que pensaba en él, sobre mí, en todas partes.

—Me estás haciendo perder la cabeza…— me levanta por los muslos y me sienta, colocándose entre mis piernas.

—Me estás matando…— dice entrando a mí, poco a poco y luego de un solo movimiento. Ambos gemimos como desquiciados

—¡Sebastián!— grito yo mientras él comienza a moverse.

Yo me sujeto a él como puedo, mientras que por cada movimiento, yo grito y él gruñe. Sujeta mis piernas y me atrae más hacia él y su agarre en mi cadera se intensifica.

—Maldición, maldición…— dice él entre gruñidos.

Con una mano me apoyo de la mesa y la cara de él se apoya en mi hombro. La mesa chirría, las cosas caen por todos lados y se rompen y creo que toda la casa retumba. Cuando él acelera yo grito.

—Te sientes…fantástico…— digo entre gemidos y él mueve sus caderas de forma circular, yo siento que no tengo fuerzas y él ahora me sujeta completamente.

— ¿Tu propósito es destruirme? ¿Hacerme perder la cabeza?— dice rugiendo. Yo chillo cuando empieza a mover sus caderas, buscando tocar todos mis puntos.

—¡Maldición… maldición!— grita él cuando yo siento que convulsiono, apretándolo dentro de mí y vengo de una forma tan colosal que veo manchas negras y siento que me desmayo.

Cuando él grita y me abraza con locura, siento que vuelvo a la realidad.

—Eres mi perdición Tatiana… juro que haces que deje de pensar… por la diosa… — dice besándome de nuevo.

Él me carga, y en segundos estoy en mi cama. Siento las sabanas suaves y como él me quita mi falda, mis zapatos y me observa ahí.

No era nadie que hubiese pensado y siento que se me cae la cara de vergüenza.

—¿Henry, Marina?—

—Tati… ¿Estás bien? Estábamos preocupados…te escribimos anoche y no respondiste— dicen viéndome con preocupación.

—Ehhh tuve mucho trabajo, el restaurante está con mucho movimiento. Al parecer cerraron unos restaurantes en otros pueblos…— digo yo.

En la entrada hay cosas rotas, flores en el piso y… tengo moretones y chupones en el cuello. ¿Qué pensarán de mí? Su hermana tranquila y juiciosa en este estado ¡La casa en este estado!

—Guerreros…— escucho una voz atrás y me estremezco. Sebastián sin duda se ha despertado, y ha bajado a ver qué sucede.

—¿Alfa? ¿Qué hace aquí?— pregunta Henry y yo me muero de la vergüenza.

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: Una curvy para el Alfa