Una curvy para el Alfa romance Capítulo 87

—Es solo que todo el mundo pareciera llevarse bien con ella, excepto yo…— digo y soy plenamente consciente de que me escucho como un malcriado. El humano no es malo del todo, pero no puedo controlarme.

—Creo que es porque todos tienen un pasado diferente con Tatiana y a la vez... ellos tampoco tienen sentimientos tan intensos como tú—me dice y por supuesto tiene razón.

—Tampoco el resto está tan desesperado, soy yo el que no puedo vivir sin ella, en cambio, ella... estaba dispuesta a dejarme— digo agotado mientras él maneja.

Veo a través del espejo retrovisor a Tatiana profundamente dormida, abrazando a su hermana. Si tan solo todo fuera diferente. Si tan solo yo hubiese sido un hombre decente y no hubiese echado a una pobre chica de la manada. Si yo la hubiese al menos escuchado…

—Yo creo que las cosas sucedieron así por una razón, gracias a ella nosotros hemos cambiado la percepción de los humanos y ahora los estamos defendiendo, y tú también has cambiado Sebastián— dice mi amigo.

—Si… me lo dijo mi madre también... y a la vez sé que mi madre tiene problemas en aceptar a Tatiana. Ahora tengo que enfrentarme a un alfa, a un Concilio, tener que lidiar con mi lobo que me odia, con mi padre que quiere imponerme una luna, tengo que llevar a un humano a mi manada, resolver para que Tatiana sea aceptada en Medianoche... ¿Podrían dejar de aparecerme problemas?— digo y él me coloca una mano en mi hombro.

—Lo resolveremos amigo, tienes muchos problemas, pero también gente que te apoya y que por nada del mundo te va a dejar...¡hasta aliados vampiros tenemos!— dice él dándome ánimos.

Y si es verdad que tenía muchos problemas... todo se esfumaba cuando la veía ella. Cuando la ayudaba a bajar del auto y tomaba su mano… mi mundo se iluminaba. Tocarla, sentir su aroma… era el cielo.

En el límite de nuestro territorio veía que varios guerreros se habían organizado para recibirnos, encabezados por Noemí y mi madre, también Henry que ya había mejorado.

—Alfa y Tatiana... bienvenidos. Hemos preparado un grupo especial que estará completamente a tu disposición Tatiana — dice mi madre y no la noto del todo cómoda

—Sabemos que Medianoche no ha hecho las cosas bien en el pasado contigo, pero tenemos toda la intención de mejorarlas, de cambiar completamente tu opinión— dice Noemí.

Tatiana parece impresionada. Veo que me da una mirada de reojo y yo le sonrío.

—Gracias luna y Noemí, gracias por recibirme— responde mi mate y le da una mano a la guerrera que está mucho mejor.

Yo ahora… tenía preparada unas palabras para darle también la bienvenida ¡Por la diosa! Había esperado tanto este momento.

—Tú… tu eres muy hermosa…no se que es bien todo esto, pero si tu…— dice él sonriendo como un niño y ella suelta una carcajada y sin dejarlo terminar, se inclina a besarlo.

El humano se queda quieto, pero poco a poco se va rindiendo al beso. Él la abraza y se quedan en ese beso por lo que parecen, horas. Yo carraspeo. Por la diosa todo me molesta hoy.

—Bueno... eso es algo que no se ve muy a menudo, ¡mates destinados y verdaderos encontrándose!— dice David, feliz.

—¡Realmente la diosa nos ha bendecido!— dice mi madre encantada, a quien no parece importarle que el chico sea un humano. De hecho, a nadie en parecer importarle remotamente eso.

Todos sonríen y los felicitan, el muchacho no parece entender nada de lo que sucede, pero está completamente complacido de que esa chica pelirroja parece estar enamorada de él, y no la deja de ver ni un segundo.

Todos entran y yo… no le dije nada a ella, no le di la bienvenida que había planificado. Ella me da una mirada extraña y se aleja de mí.