Una curvy para el Alfa romance Capítulo 98

Tatiana

Ya pensé que volver a la manada iba a ser malo, pero nunca había imaginado que tan malo iba a hacer. Dicen que la realidad supera la ficción, y eso es muy cierto

Nunca me había sentido tan deprimida en toda mi vida, yo había perdido mucho y había sufrido bastante, pero ahora era totalmente diferente.

Creo que tenía que ver en parte que yo muy dentro de mí tenía esperanza de que esto fuera a funcionar por mucho que lo negara... y también porque yo misma había obstaculizado todo, no había dado mi brazo a torcer para que esto funcionara.

Él me había herido, sí, pero mis inseguridades habían jugado un rol importante. Me preguntaba ahora cómo hubiese sido si yo fuese una humana cualquiera que él hubiese conseguido en el pueblo, ¿se avergonzaría de mí? ¿Me hubiese escondido?

Supongo que nunca lo sabremos, puesto que de todas las opciones de mate que él pudo obtener en este universo... le tocó la única chica con la que no debería estar, y eso era tan doloroso como cierto.

— Mi Luna... por favor come algo— me decía Noemí angustiaba.

— No tengo hambre— le indicaba y no era mentira ni quería llamar la atención, realmente no me provocaba absolutamente nada.

— Necesitas reponerte, estar fuerte por todos, eres nuestra Luna ¿lo entiendes?— me decía ella para luego cansarse y dejarme otra vez sola, mientras yo me consumía en mis terribles pensamientos.

Yo honestamente no sabía ni qué día era ni cuánto tiempo había sucedido, solo sabía que mi cuerpo se sentía débil y yo miserable. Sentía lástima de mí misma, la pobre humana gordita que no había podido superar sus traumas.

Hasta que él volvió con su hermosa sonrisa, sus ojos azules, sus te amos, y su lobo maravilloso. A veces sentía que no tenía realmente una oportunidad y que yo iba a caer estrepitosamente.

¿Y qué sería de mí? La mate escondida, un fantasma de mí misma que nadie sabe si realmente existe, viviendo siempre en las sombras y con la eterna duda: ¿podría haber tenido otra vida? ¿Podría haber estado realmente sin él?

— Lo que hizo ese hombre ha sido horrible... pero más allá de eso estás tú primero para nosotros,, siempre y tienes que mejorarte— decían mis hermanos.

Ellos habían estado conmigo, acompañándome un buen tiempo, molestos terriblemente con su Alfa y yo sabía que eso era suficientemente difícil para los lobos.

— Tatiana.. siento mucho lo que sucedió y créeme que no era el objetivo de esa reunión— me decía Nancy acompañada de Enriqueta.

Ambas Lunas lucían realmente preocupadas y habían ido a visitarme más de una ocasión.

— Créeme cuando te digo que nunca nuestro objetivo fue que la pasaras mal, sino todo lo contrario, que encontraras en Medianoche tu lugar. Pero sé que no lo hicimos bien y no pensamos realmente las consecuencias de todo lo que te había pasado en la manada. Ahora lo sé— me decía la madre de Sebastián mirándome con ojos llorosos.

— Y sé que fue nuestra culpa absolutamente y que quizás no haya mucho que podamos hacer para enmendarlo, solo decirte que las cosas cambiarán y que te necesitamos— me decía ella y tomaba mis manos, y su actitud me sorprendía.

— Tienes que confiar en que no dejaremos esto así como así y que tu lugar está aquí con nosotros... pero por sobre todas las cosas, Sebastián te necesita…— decía ella rompiendo a llorar.

— Él está... destrozado, te necesita... y tú también a él, estoy segura. Lo siento.. no puedo ver a mi hijo sufrir así— decía y de repente y se iba al baño, hecha un mar de lágrimas. Enriqueta se me quedaba mirando y luego se acercaba a abrazarme.