Divorciada: Su Revolución Científica romance Capítulo 506

Al sentir aquellas palabras, el corazón de Lucía se llenó de calidez. De verdad, Micaela siempre pensaba en los demás.

—Está bien, entonces me voy primero. Come más, ¿sí? —dijo Lucía con una sonrisa, mientras salía del lugar.

Micaela, que apenas había probado bocado al mediodía, sentía cómo el hambre la apretaba. Justo cuando mordía un pastelito, una voz sorprendida se escuchó fuera de la puerta.

—¿Sr. Gaspar? ¿Está buscando a Micaela?

Era Tadeo, que preguntaba desde el pasillo.

—No —se escuchó de inmediato la voz distante de un hombre.

Tadeo, todavía sin salir de su asombro, vio a Gaspar dar media vuelta y marcharse. Con los papeles en la mano, Tadeo entró a la oficina de Micaela.

—Oye, ¿el Sr. Gaspar te buscaba por algo? —preguntó curioso.

Micaela ni siquiera se había dado cuenta de que Gaspar estuvo en la puerta, así que negó con la cabeza.

—No sé, no tengo idea. Anda, prueba un poco de esto.

—¡Uy! Huele riquísimo —exclamó Tadeo, que aprovechó para tomar dos pastelitos antes de irse.

Micaela sacó su celular y, agradecida, le mandó un mensaje a Felicidad.

[Gracias, Sra. Felicidad, por la sopa y los pastelitos. De verdad, le agradezco mucho.]

[No hay de qué. Cuando quieras comer algo, dímelo y la señora manda a alguien a llevarte lo que se te antoje] —respondió Felicidad en seguida.

Micaela no quería ser una carga para la familia Montoya, así que de inmediato contestó con delicadeza:

[Gracias, Sra. Felicidad, pero mi trabajo cambia mucho y no quiero molestarla con eso.]

Felicidad captó al instante la intención de Micaela y le escribió:

[Está bien, entonces ven a casa cuando tengas tiempo. Ya tiene días que no te vemos a ti ni a Pilar.]

[¡Claro! Muchas gracias, Sra. Felicidad] —respondió Micaela y, tras enviar el mensaje, soltó un suspiro. En temas de relaciones personales, nunca había sido muy hábil.

...

En un abrir y cerrar de ojos, el Día de Muertos se acercaba. Micaela pensaba en cómo pasar la festividad con su hija cuando, de pronto, le llegó un aviso inesperado.