Entrar Via

Él Eligió a Otra, Yo Elegí a Su Hermano romance Capítulo 226

Sofía no se dio cuenta de nada.

En cambio, el corazón de Gabriel se aceleraba.

De repente pensó que ser el modelo personal de Sofía no estaría tan mal.

—No le hagas caso a las tonterías de Camilo —dijo.

—Él es quien siempre me ha estado fastidiando.

—¡Ahí vas otra vez, Gabriel! Desde niño siempre te ha gustado hacerte la víctima —respondió Camilo.

Gabriel se rio y dijo con sarcasmo:

—¿Y tú te atreves a decirme eso?

—Sofía, ¡dinos tú! —dijo Camilo.

Aunque aún recordaba el roce accidental de su piel, Gabriel no mostró nada en su expresión.

—Eso, Sofía, danos tu opinión.

—Arréglenlo entre ustedes —respondió ella, y se paró para irse.

Carter se levantó de inmediato para seguirla.

Gabriel notó cómo el stripper se sentaba demasiado cerca de ella, mientras que él había mantenido la distancia.

¡Maldición!

Camilo notó la molestia de su primo hacia Carter y dijo con fastidio:

—¿De verdad te molestó? ¡Ya ni aguantas una broma! Antes eras más divertido.

—No sabes nada —respondió Gabriel.

—¿Y qué tiene de malo ser stripper? La vida se trata de experiencias; entre más vivas, más entretenida es —se rio Camilo.

Gabriel no quiso perder el tiempo discutiendo con él.

Se preguntó si debía salir a buscar a Sofía.

Pero, si lo hacía, ¿qué le iba a decir?

Si quería acercarse, tendría que meterse en su vida.

Podía ayudarla para que le debiera un favor, o al revés, dejar que ella lo ayudara y así él tendría que pagarle el favor.

Quizás lo segundo era mejor…

Con esa idea en mente, se paró de repente, miró a Camilo, su nuevo “instrumento”, y con una sonrisa malvada, se fue.

Camilo puso los ojos en blanco.

Sacó su celular y cambió el contacto de su primo a “Gabi Stripper”.

—… ¿Y no te preocupa que, si llegas a ser famoso, esto se convierta en un escándalo? —preguntó Sofía.

—Si llego a ser muy famoso, esta tontería no le importará a la agencia. Y si no lo logro, incluso la mala fama es fama.

Luego la miró fijamente.

—¿He dado suficiente compañía, señorita?

Sofía había venido a relajarse, solo quería sentirse cómoda.

Él se adaptaba por completo a lo que ella buscaba, y sí, era agradable.

Pensó en cómo ella misma había tratado antes a Diego, con todo el cuidado, y él solo la recibía con seriedad.

Quizá había sido su error: darle demasiado, esperando obtener su amor.

—¿Señorita? —la llamó de nuevo, al verla distraída.

En ese momento, una fuerza brutal lo empujó a un lado.

Se tambaleó, pero logró estabilizarse.

Y vio cómo un hombre alto y furioso se plantaba frente a Sofía, exigiendo saber:

—Sofía, ¿quién es él?

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Él Eligió a Otra, Yo Elegí a Su Hermano