Ella Aceptó el Divorcio, Él entró en Pánico romance Capítulo 119

~Sebastián~

Scar se había estado escondiendo en la casa de Aurora, lo sabía. Quise darle un poco de tiempo y espacio, aunque en el fondo sabía que igual no me iba a escuchar.

Últimamente, Adrián no paraba de lanzarme comentarios o indirectas , y al principio pensé que lo hacía porque sentía algo por Scar, y lo ignoré. Pero en cuanto Scar apareció en casa de los Fuller, entendí todo

Estaban tramando algo, y Scar quería que yo los distrajera.

Me quedé en mi oficina, y claro, no pasó ni una hora cuando Ava entró de repente, llorando, diciendo que Scar quería sacarla de la familia.

Ya aprendí a no tomarme tan en serio algo solo porque ella me lo diga.

Llevaba años acusando a Scar de mil cosas y yo le creía. Ella había mencionado que le había dado dinero a Liam para salvar su propia vida. No tenía pruebas, así que era su palabra contra la de Liam Ryan.

Pero lo que pasó el otro día en el aeropuerto fue diferente.

Como siempre, tenía mil razones para estar 'enojada'. para 'proteger a papá' y 'decir cosas sin pensar' pero mi forma de ver las cosas cambió cuando dijo lo del pasado de Scar en público y como si nada.

Y talvez todo eso podía ser verdad.

Hasta que se puso a llorar cuando Scar rompió los papeles del divorcio.

Vi cómo su llanto 'asustado' se convirtió en un grito desesperado. Y pude ver la diferencia de cuando llora en realidad, eso dejó muy claro lo falsa que era su actuación. Después de ver eso ya no podía tomar en serio sus gestos de siempre.

¿En serio la conocía?

Ya no veía en ella a la chica inocente que 'salvé'. No sabía si eso fue un papel de actuación, o si toda su vida lo fue. Pero claramente, había recorrido un largo camino desde entonces.

Igual la llevé de vuelta a casa.

No pude aguantarme la risa.

Me acerque un poco, y Scar se puso tensa. Me miró con los ojos entrecerrados, como si temiera que la fuera a lastimar, así que me detuve. Su reacción me dolió. Parte de mí se arrepentía profundamente y solo quería arreglar las cosas, pero otra parte solo quería abrazarla y borrar todo lo que había pasado.

Pero no podía. No quería herirla más de lo que ya lo había hecho.

Me acerqué despacio, más lento, así como cuando uno quiere acariciar a un gato callejero asustado. Levanté la mano, y Scar se pegó a la pared como si tratara de hacerse invisible. Al final, solo apoyé la mano en la pared, junto a ella.

Antes abrazarla era tan fácil… y ahora se sentía como si estuviera tan!!! lejos de mi.

—Si ya terminaste de desquitarte —incliné un poco la cabeza, intentando hacer que me mirara— ¿quieres venir conmigo a casa? Te extraño. Mucho.

Scar abrió los ojos como platos. Ella estaba muy sorprendida.