Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 776

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"¿En serio no entiendes lo que estoy diciendo?" Cintia no pudo evitar sonreír con desdén, su expresión era fría y algo despectiva, "Si ella es su hija y ha vuelto pero no se ha comunicado con ustedes. ¿Les parece normal?"

Mientras hablaba, miró a Fausto, cuya cara se había vuelto aún más pálida: "Especialmente tú. ¿No se supone que tu hija es la más devota y la que más te cuida? Si realmente fuera ella, ¿cómo es que no ha regresado a verte?"

Fausto se volvió aún más pálido, incapaz de refutar las palabras de Cintia.

Conocía bien a Amelia; no era alguien que despreciara a su familia, especialmente a él.

Cuando tuvo un accidente, ella voló desde miles de kilómetros de distancia solo para verlo y cuidarlo. Ahora, estando en la misma ciudad, a menos de una hora en coche, ¿cómo no iba a contactarlo si realmente fuera ella?

"Quizás es que..." Al lado, Blanca intentó encontrar una razón convincente, "¿Tal vez todavía no ha tenido tiempo?"

Pero antes de que pudiera terminar, Cintia soltó una risa fría y despectiva: "¿No tiene tiempo? ¿Cómo no va a tener tiempo si no trabaja, no tiene un empleo y hasta tiene niñera para cuidar de su hija? ¿Realmente crees que estaría tan ocupada como para no tener tiempo ni para una llamada a sus padres? Además, estos días son de fiesta, si normalmente no tenía tiempo de visitar a sus padres, al menos debería hacerlo durante las fiestas. ¿No les parece raro? Ni siquiera una llamada les ha dado, ¿verdad?"

Blanca se sintió aún peor, pero no pudo refutar.

Amelia realmente no había llamado. Antes, aunque no pudiera regresar a casa para las fiestas, siempre llamaba a su padre para felicitarlo y preguntar por su salud, incluso le enviaba suplementos y algo de dinero.

Incluso después de que fue expulsada de casa por devolver a Dorian el dinero de la compensación forzada y le dijeron que nunca volviera, aunque Amelia nunca regresó, seguía llamando de vez en cuando para saber sobre la salud de su padre. Que ahora, con un asunto tan grave, supiera que su padre estaría preocupado y aun así no llamara para tranquilizarlo, claramente era anormal.

Sin embargo, Fabio se enfocó en otro aspecto de lo que Cintia había dicho: "Entonces, ¿lo que está diciendo es que realmente apareció una mujer idéntica a mi hermana al lado de mi cuñado?"

"¿Cuñado? Han estado divorciados por años," Cintia corrigió frunciendo el ceño.

Pero, Fabio insistió impaciente: "Por favor, dígame, ¿es verdad? ¿Ha aparecido tal persona?"

"Sí," Cintia confirmó de manera concisa.

La seguridad en su tono hizo que Fabio y Blanca se miraran preocupados, todo el entusiasmo que traían se transformó en inquietud.

No dudaban de que Dorian pudiera encontrar a alguien parecido a Amelia; cosas así podían suceder. Con la posición y la riqueza de Dorian, no era imposible encontrar a alguien así.

Solo Fausto seguía mirando a Cintia con los ojos llorosos: "No importa si es o no es ella, necesito verla."

Cintia no lo detuvo, solo miró hacia la puerta de la casa de Dorian, frunciendo el ceño: "¿No hay nadie en casa?"

"Estuvimos tocando el timbre un buen rato y no respondió nadie," dijo Fabio.

Cintia frunció aún más el ceño, pero no se atrevió a contactar directamente a Dorian, así que llamó a Pamela, quien le había informado. Apenas respondió la llamada, Cintia preguntó, "¿Tu hermano te dijo a dónde ir para encontrarlo?"

Pamela estaba intentando dormir a su hijo, así que hablaba en voz baja: "Dijo que en su casa."

Cintia preguntó: "¿Mencionó cuál casa?"