Seduciendo al suegro de mi ex romance Capítulo 163

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POV de Judy

Mi estómago rugía furiosamente. No había comido mucho más que sobras en días. Cuando Kelsey vino a buscarme y me dijo que fuera al comedor, pensé que finalmente iba a conseguir algo de comida decente. Pero me decepcioné amargamente cuando vi que ya habían comido y ni siquiera habían dejado una sola migaja.

Todo lo que quedaba eran sus platos sucios y copas de vino vacías.

Les dio la noche libre a las criadas y esperaba que yo limpiara todo el desastre sola, mientras ella observaba como algún tipo de perturbada.

Me ridiculizó todo el tiempo.

Tomé una bandeja grande y comencé a apilar algunos de los vasos y platos en la bandeja. Justo cuando pasé junto a ella y me dirigí hacia la cocina, puso el pie, haciéndome caer al suelo y romper la mayoría de los platos y vasos. Uno de los pedazos de vidrio me cortó el dedo y silbé de dolor al ver sangre acumulándose en mi palma.

—¡Tan jodidamente torpe! —siseó Kelsey—. ¡Mira lo que hiciste!

—Fuiste tú la que me hizo tropezar —murmuré mientras sostenía mi mano herida. Movió su mano tan rápido; ni siquiera lo vi venir. Pero sentí el ardor de la bofetada y me mordí el labio por la fuerza. Pude saborear sangre en mi boca por haberme partido el labio.

¿Por qué me estaba pasando esto? ¿Qué había hecho para merecer esto?

—Ay, ¿ahora vas a llorar? —preguntó Kelsey, cruzando los brazos sobre el pecho—. Supéralo. Nadie va a venir a rescatarte, especialmente no tu madre patética.

Levanté la mirada y la miré a través de mis ojos llenos de lágrimas.

—No te atrevas a hablar de mi madre así —dije, mi tono saliendo tembloroso. Sabía que si realmente quisiera, podría fácilmente golpearla hasta hacerla mierda a Kelsey. Pero no podía por mi madre... nunca me perdonaría si arruinara esto para ella.

Me sentía tan indefensa en este momento. El dolor en mi mano punzaba aún peor mientras Kelsey se reía.

—¡No eres más que una perra inútil! Solo sirves para ser una esclava y limpiar después de la comida de mi familia. ¿Cómo se siente ser una don nadie?

Justo entonces, la puerta del comedor se abrió de golpe, y Kelsey se tambaleó hacia atrás cuando vio al intruso.

—¡¿Qué significa esto?! —Un rugido familiar resonó por la habitación. Todo mi cuerpo se quedó inmóvil al escuchar su voz.

Levanté la mirada, y me quedé atónita al ver a Gavin parado frente a mí. La ira emanaba de él en oleadas mientras fulminaba con la mirada a Kelsey. Su aura de Licántropo brillaba más fuerte que su aura de Alfa. Estaba furioso y estaba a punto de hacer que todos en esta casa lo supieran.

—A... Alfa —balbuceó Kelsey, de repente pareciendo una niña débil—. Solo estaba... estaba...

—Está herida y tú la estás ridiculizando —siseó Gavin; no era una pregunta, solo una observación—. ¿Por qué está en el suelo con vidrio alrededor de ella?