POV DE JUDY
No estaba ciega. El tipo que estaba en la sala con Irene y Ethan era increíblemente atractivo. También me resultaba algo familiar. Me miraba como si yo fuera la única persona en el mundo, y eso hizo que mis mejillas ardieran.
Parpadee varias veces y le ofrecí una pequeña sonrisa antes de salir rápidamente de la habitación para reunirme con Matt afuera. Estaba lanzando dagas a los muñecos de práctica. Su técnica había mejorado con el tiempo. Cuando me acerqué, se detuvo y tomó la botella de agua que le ofrecí.
—¿Sabes si Irene esperaba visitas hoy? —le pregunté, sentándome en el césped junto a él.
Miró hacia la villa y lo pensó por un momento, y entonces el reconocimiento brilló en sus ojos.
—Mi primo Walter está de visita por un mes —me respondió Matt—. Solo lo he visto una vez, pero creo que se suponía que vendría en algún momento hoy.
Fruncí el ceño mientras pensaba en eso, y entonces me di cuenta de por qué me resultaba tan familiar.
—¿Walter Landry? ¿El periodista francés? —le pregunté, levantando las cejas.
Conocía a Walter Landry, por supuesto, pero pensaba que era solo una coincidencia que su apellido fuera el mismo que el de Gavin. No sabía que estuviera realmente emparentado con Gavin Landry y su familia. Pero Matt asintió con la cabeza y me miró.
—Sí —me respondió—. ¿Has oído hablar de él?
—Claro que he oído hablar de él. Su trabajo es increíble —le dije, moviendo la cabeza pensativamente—. No puedo creer que realmente seas pariente suyo.
—Su apellido es Landry —me dijo Matt con una sonrisa burlona.
—Sí, pero pensé que era una coincidencia —admití—. ¿Qué está haciendo aquí?
Matt iba a responderme, pero una voz sonó detrás de mí, haciendo que todo mi cuerpo se congelara.
—Estoy tras mi próxima historia. ¿Tiene alguna pista para mí, Srta. Montague?
Me giré para ver a Walter caminando hacia nosotros. El sol brillaba sobre él y parecía un ángel resplandeciente bajo una luz fluorescente. Era guapo, sin duda, pero no tan guapo como Gavin. Aunque el parecido familiar era definitivamente evidente.
Parpadee varias veces, tratando de recuperar mi enfoque y compostura.
—Señor Landry, es un honor conocerlo —le dije, extendiendo mi mano para estrechar la suya.
Miró mi mano por un momento y luego sonrió antes de tomarla. Su mano estaba cálida en la mía. No estrechó mi mano, sino que la llevó a sus labios y besó suavemente la parte superior.
—Entonces probablemente deberíamos irnos —le dijo Ethan, agarrando el brazo de Irene—. Tenemos lugares a donde ir. ¿No es así, Walter?
Los ojos de Walter permanecieron fijos en los míos.
—En realidad, me gustaría quedarme un poco más. Tal vez podría ser de ayuda para Judy.
Levanté las cejas hacia él.
—¿Crees que podrías serme útil? —le pregunté—. No creo que necesitemos a un periodista aquí. Pero gracias.
Empecé a darme la vuelta para alejarme, pero la voz de Irene me detuvo.
—En realidad, Wallie tiene mucho entrenamiento como guerrero. Va a ser el nuevo Alfa de la manada Noche Negra en Francia cuando su padre se retire —explicó Irene—. Cuando no está dirigiendo su propia empresa periodística, está entrenando con los guerreros y aprendiendo todo lo que necesita saber sobre ser un Alfa.
Walter sonrió con satisfacción ante sus palabras, y levanté las cejas hacia él.
—¿Es eso cierto? —le pregunté.

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