Epílogo: Más que a nada en el mundo
"Narra Sabrina Spencer"
Siete meses después nacieron Fabio Junior y Brina Caruso. El pequeño bebé era demasiado mañoso y desde su nacimiento, mientras que su hermana era dulce como un pastelito. Yo no podía recordar la última vez que había dormido más de tres horas seguidas. Sí, la maternidad era agotadora, pero con solo una sonrisa de mis bebés mi mundo se iluminaba y hacía que todo valiera la pena.
—Mi obsesión por buscar una esposa perfecta me llevo hasta ti, hasta ustedes dos —confesó mi marido de pronto mirándonos a los bebés y a mí—. ¿Quién lo hubiera imaginado? —Las nubes se disiparon y el hermoso rostro de Fabio se iluminó—. Entre el rencor, el miedo y la ignorancia, no he podido pensar en formar una familia. Y, sin embargo, la tengo aquí, ante mis ojos.
Percibí la emoción que irradiaba.
—Y ni siquiera te he dado las gracias todavía —añadió.
—No tienes que darme las gracias, Fabio.
—Desde luego que sí. Un millón de gracias por el regalo que representan nuestros hijos. No te imaginas lo que significa para mí.
Me mordí el labio inferior. Amaba tanto a aquel hombre…
—Que conste que no los he hecho yo sola… —dije insinuante, con un brillo de picardía en la mirada.
—Eso es verdad —Fabio imitó mi gesto—. Quizá sea una buena ocasión para recordar cómo lo conseguimos.
—Puede que sí.
Fabio me atrajo hacia él y entrelazando sus piernas con las mías, se frotó sensualmente contra mi vientre.
—Te amo, Sabrina Caruso, mi esposa y dueña de mi corazón —susurró—. Ti amo tanto. ‘Te amo muchísimo'.
Mientras el calor nos envolvía, se separó de mí para poder besarme con la pasión y el anhelo de un hombre decidido a demostrar sus palabras con actos.
El sol empezaba a asomar en el horizonte y Fabio ajustó una manta sobre mis hombros al tiempo que miraba a nuestros hijos, uno que descansaba en mi regazo y la princesa en el cochecito.
—¿Estás segura de que ninguno de los tres tienen frío?
—Estamos perfectamente —dije alisando el cabello de nuestro pequeño—. Recuerda que nuestro Junior está encantado con que haya alguien despierto y dispuesto a entretenerlo a una hora tan intempestiva.

Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: ¡CÁSATE CONMIGO! Tendrás a mi bebé.