El Baile de Despedida del Cisne Cojo romance Capítulo 315

Pero Cristina no pensaba rendirse. Aunque no logró que le salieran las lágrimas, igual soltó esas palabras incómodas que tanto quería decir, poniendo cara de víctima y tratando de sonar sincera.

—Perdón, señora, yo nada más le digo señora, ¿eso no está bien…?

—A ver, hasta ahí —Beatriz le contestó sin dudar, volteando hacia Ernesto—. Dime, ¿tu papá tiene una hija fuera del matrimonio o qué?

A Ernesto le retumbó la cabeza.

—Por favor, no digas eso, ¿qué estás diciendo?

Beatriz soltó una risa desdeñosa.

—¿Entonces por qué aparece de la nada una que quiere decirme señora?

—Ya te pasaste —Gregorio, que hasta ahora había aguantado en silencio, no pudo más—. Cristina siempre nos ha dicho hermanos, y ahora…

—¿Y eso a ti qué? —Beatriz lo interrumpió, sin bajar el tono—. Yo hablo de mi esposo, ¿qué te importa a ti? Si quiere decirte hermano, que lo haga, pero a mi esposo no. Mi esposo no tiene hermanas, ¿tú qué tienes que andar metiéndote?

Gregorio se quedó sin palabras, furioso, mirando a Ernesto como si buscara apoyo. Ernesto ya estaba hecho un manojo de nervios, se acercó a su esposa casi rogando.

—Amor, por favor, mira que hoy es un evento importante, no hagamos un escándalo aquí, da pena.

Beatriz estuvo a nada de jalarle la oreja, y solo porque estaban en público se contuvo, apretando los dientes.

—¿Pena? Yo soy tu esposa legítima, Fabiana es la esposa de él, Estefanía es la esposa de Benicio. Aquí estamos todas bien plantadas en la fiesta, ¿por qué habría de dar vergüenza? ¿Quién es el que da pena aquí? ¿Quién?

—Por favor, mi amor… —Ernesto ya casi se le colgaba del brazo como un perrito.

Beatriz resopló y fue directo a tomarle la mano a Estefanía.

Cristina todavía intentó meterse, con ese tono de siempre, fingiendo ser sensible y con los ojos rojos.

—Gregorio, Ernesto, señoras… Yo no quise decir nada malo. Siempre he sido amiga de ellos, solo quiero lo mejor para todos. Hoy el evento es importante y quería ayudar. Es que Estefanía nunca viene a estas cosas, y además…