El Baile de Despedida del Cisne Cojo romance Capítulo 334

Estefanía no preguntó más. Si ya había recogido todo, entonces estaba bien.

Gilberto le indicó al chofer que arrancara el carro y luego le dijo:

—Trata de dormir temprano esta noche. Mañana tienes cosas pendientes, ¿no? Yo te acompaño.

Estefanía asintió.

Que su hermano fuera con ella no le parecía mal; así evitaba que Benicio le saliera con alguna tontería a última hora.

Por fin, todo esto estaba por terminar.

Cinco años.

...

Gregorio y Cristina regresaron a la casa de Cristina después de ir al hospital, donde solo les hicieron unas curaciones rápidas.

Las lesiones no eran graves. Nada de órganos dañados ni fracturas, pero sí se veían mal: los dos carros llenos de tipos vestidos de negro solo les pegaron en la cara. Así que, además de tener la cara hinchada como si les hubieran dado una paliza, el resto del cuerpo les dolía, pero a simple vista no parecía tan grave.

—¡Maldita sea, seguro que esos tipos los mandó Gabriel! —Gregorio se dejó caer en el sillón, sintiendo el cuerpo adolorido—. Pura técnica profesional, puro dolor y ni una herida abierta.

Pero no había nada que hacer. La noche estaba muy oscura, era imposible distinguir los rostros de los atacantes, se movieron tan rápido que ni siquiera alcanzaron a ver la placa de los carros.

Sin revisar las cámaras de seguridad sería imposible saber quiénes eran, pero si no se hacía una denuncia, tampoco tenían derecho a pedir los videos de la calle.

Cristina, de regreso en casa, encendió su celular y revisó las tendencias. Para su sorpresa, todo lo que veía eran insultos dirigidos a ella; además, sus cuentas en redes sociales estaban invadidas de comentarios ofensivos y vulgaridades de todo tipo.

Entre lágrimas, exclamó:

—¿Y ahora qué voy a hacer? ¡Todos me están insultando! ¿Cómo se supone que vuelva a salir a la calle después de esto?

De pronto, notó que el grupo de chat de los vecinos tenía más de 99 mensajes sin leer.