El Baile de Despedida del Cisne Cojo romance Capítulo 540

En ese momento, Benicio la miró a los ojos y tardó mucho en responder.

Estefanía asintió.

—Parece que tú tampoco lo sabes.

—No, sí lo sé —se apresuró a decir Benicio.

Estefanía esperó a que hablara.

—Sé que no tenía novia —Benicio bajó la cabeza y sonrió, y al levantarla de nuevo, su sonrisa era extraña—. Pero no sé quién era la chica que baila.

Estefanía frunció el ceño, pensativa. Recordó al hombre del sueño de anoche, que conducía a toda velocidad por la costa. Incluso ahora, despierta, parecía poder sentir la vitalidad y la audacia de la vida.

—¿Qué pasa? —Benicio notó que su expresión era extraña.

Estefanía suspiró.

—No sé cómo decirlo. A veces las personas son muy contradictorias. Era una persona tan buena, y pensar que terminó su vida solo, sin que nadie lo amara, me parece una lástima. Pero, por otro lado, pienso que era tan increíble que, si de verdad una chica lo hubiera amado, ¿qué tan terrible habría sido para ella perderlo? ¿Cuánto tiempo tardaría en sanar? Así que no sé si es mejor que haya tenido novia o que no.

—¿Y tú cómo sabes que era bueno? —preguntó Benicio con una sonrisa—. No estábamos en el mismo salón que él. Yo solo era su compañero de baloncesto, pero tú no lo conocías.

Estefanía puso los ojos en blanco.

—¿Acaso no era mejor que tú?

Al ver su rostro de nuevo, y aprovechando que Ana no estaba cerca, no pudo evitar lanzarle un comentario sarcástico:

—¿Cómo es que un patán como tú le gusta a tantas chicas buenas? ¡El cielo de verdad que no tiene ojos!

El rostro de Benicio mostró un momento de vergüenza, y forzó una sonrisa.

—Estefanía…

Justo en ese momento llegaron la tutora y Frida. Estefanía recogió sus cosas y salió con ellos. Frida incluso se dio la vuelta para despedirse de Ana y Benicio.

—¡Nos vemos en la noche para beber, ya quedamos!

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