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El Baile de Despedida del Cisne Cojo romance Capítulo 556

Néstor y Noel se quedaron perplejos.

No esperaban que Úrsula dijera algo así.

Pero ella, como si hubiera encontrado la solución perfecta, sacudió a su padre por los hombros. —Papá, ofrezcámosle dinero. Lo que pida.

Esteban se puso a considerarlo seriamente.

Por primera vez, Néstor no estuvo de acuerdo. —¿Están seguros de que aceptará el dinero?

Úrsula respondió con arrogancia: —Es una simple estudiante becada. No me digan que tiene principios. Esos supuestos principios solo existen cuando el dinero no es suficiente.

Esteban suspiró. —Llegados a este punto, podría ser una solución. Aunque pida una fortuna, la pagaremos.

Noel, mientras tanto, se limitaba a sonreír sentado en el sofá.

—¿De qué te ríes? —le espetó Úrsula, molesta por su actitud.

—Me río de ustedes… —continuó Noel, sin dejar de sonreír—, porque no pueden pagar lo que ella pediría.

Úrsula también se rio. —¡No es más que dinero! ¡Podemos pagar lo que sea! Si el dinero puede resolverlo, entonces no es un problema.

Noel suspiró para sus adentros. Parecía que el escándalo de Puerto Maristes de hacía dos años no había servido de lección para la gente de Nube de Sal.

Pero no dijo nada más para advertirla.

Su padre, por alguna extraña razón, también permaneció en silencio en ese momento, con una morbosa curiosidad por ver a Esteban fracasar.

Para colmo, Úrsula estaba decidida a demostrarle a Noel que tenía razón.

Así que, desde la casa de los Roldán, llamó a Estefanía.

Como antigua miembro de la compañía, conservaba su número de teléfono.

Sin importarle qué hora fuera para Estefanía, marcó el número y, en cuanto contestaron, espetó:

—¿Cuánto dinero quieres?

Nuestro precio es solo 1/4 del de otros proveedores

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