¡Por favor, sé mi pareja! romance Capítulo 159

Punto de vista de Riven

“¿Papá?”, susurré. “¿De verdad eres tú?”.

“¿Kelly? ¿Mi princesa?”, respondió en voz baja con los ojos abiertos de par en par. “Luces como tu madre. No deberías estar aquí. ¡No! ¡No puedes estar aquí!”, añadió con voz ronca.

“Hijo mío, mírala. Mira a tu hija. ¿No es hermosa?”. Delisia se burló de él.

Se dejó caer de rodillas frente a ella y comenzó a moverse de adelante hacia atrás.

“No, no, no, no, no. Por favor, no lo hagas”, le suplicó mi padre.

“No le ruegues, padre. Yo te salvaré. No tienes que rogarle”. Dije la última oración con la voz inyectada de veneno.

“¿Salvarlo? ¿Acabas de decir que vas a salvarlo? ¡No podrás hacerlo, querida!”. Seguía con el mismo tono burlón.

“¿Y por qué no?”, la miré con la misma expresión con la que me estaba mirando.

“Porque tengo tu punto débil… ¡Ah no! Debería decir tus puntos débiles”.

“¿En serio? ¿Cuáles serían?”.

Me arrojó un hechizo, que bloqueé con éxito.

“Tu padre y tu compañero”.

“¡¿Mi compañero?! ¿Estás segura?”. Sonreí.

Su confianza se tambaleó cuando vio mi expresión.

“Mi dulce abuela, ¿de verdad creíste que me quedaría de brazos cruzados después de que me enviaste de regalo un dedo de mi compañero? Lo amo más de lo que crees como para quedarme sin hacer nada”.

“¡Imposible! ¡Nadie puede irrumpir en las mazmorras de Blue Crystal!”, exclamó atónita.

“¿Segura? Porque no entré yo sola”, dije en un tono inocente.

“¡Te mataré!”, gritó.

“No puedes matarme y lo sabes muy bien”. Me encogí de hombros.

Tal vez tenía a mi padre en su poder, pero noté que estaba asustada. Rhea podía oler su miedo.

“Sé que viniste para matarme, pero te digo con mucha seguridad que no lo lograrás. Morirás al igual que tu madre”. Me amenazó.

Entonces, mi madre no había desaparecido, esta b*starda la había asesinado. Ahora tenía otro motivo para castigarla.

“¿Sabes? Al inicio, pensé que podríamos gobernar juntas. ¡Me perteneces! No existirías si no fuera por mí. Yo fui quien planeó tu existencia desde un principio”.

Hizo parecer que yo estaba viva gracias a ella. ¡Como si debiera estar besando el suelo sobre el que caminaba! ¡Qué id*ota!

Me reí de sus payasadas.

“Crees que eres mejor que yo, pero somos iguales. Después de todo, compartimos la misma sangre. Eres intrépida, insolente e imprudente como yo. En el fondo, sabes que te gusta crear caos y confusión. Tienes oscuridad dentro de ti y, con tus poderes, eres capaz de hacer cosas muy grandes. Puedo sentir lo que se esconde detrás de tu rostro angelical”. Esta mujer comenzó a divagar y a delirar.

Liam, Caleb, Cole, Kyle, Lorcan y Damon caminaron a mis costados con sus armas en las manos. Delisia soltó una risa estridente que me recordó al sonido de las uñas arañando una pizarra.

“Tus mascotas son leales, pero parece que no tienen la inteligencia suficiente para elegir el lado ganador”, dijo en burla.