Reencarné y mi Esposo es un Coma romance Capítulo 96

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—¿En qué universidad está? ¿Cómo se llama? Quiero ir a verla —dijo Sabrina. Por lógica y por principios, como esposa de Ignacio, sentía que debía visitarla. Si no fuera por el sacrificio de su hermano, Ignacio no habría sobrevivido hasta que llegara la ayuda.

—En la Universidad de Clarosol —respondió Adriana, rascándose la cabeza—. No me acuerdo de cómo se llama. Después de conseguirle la plaza, no he vuelto a tener contacto con ella.

¡La Universidad de Clarosol! La mejor de la ciudad, una institución donde no se entraba solo con dinero. ¡El esfuerzo que debió de suponerle a Adriana conseguirle una plaza a esa chica!

—A ver cómo se llama en WhatsApp… —dijo Adriana, y se puso a buscar en su celular. Finalmente, encontró el contacto. Su nombre de usuario era su nombre real.

—Mira, tiene un nombre bonito —le dijo a Sabrina, enseñándole el celular.

¡Ofelia Navarro!

Las pupilas de Sabrina se contrajeron, su pecho subía y bajaba con agitación, y sus manos, sobre la mesa, se cerraron en puños. Una oleada de odio la invadió. ¡Así que era ella! Ofelia.

—Sabrina, ¿qué te pasa? ¿La conoces? —le preguntó Adriana, al ver el odio en sus ojos. ¿Acaso tenía algún problema con Ofelia?

—No es nada. No la conozco —respondió Sabrina, recuperando la compostura—. Es muy guapa. ¿Estudia dirección de cine en la Universidad de Clarosol, verdad?

—¿Cómo lo sabes? ¿Lo he dicho antes? —preguntó Adriana, extrañada.

Sabrina sonrió con frialdad. No lo había dicho, pero en su vida pasada, Ofelia también estudiaba dirección de cine. Durante sus estudios, se había liado con Julio, un famoso director. Casualmente, Mauricio ansiaba protagonizar una película de Julio, pero su talento no daba la talla, y ni siquiera su estatus como segundo hijo de la familia Guerrero le sirvió para conseguir el papel. Y también casualmente, Petrona conocía a Ofelia, y esta le sugirió que, si le ofrecía a Julio una mujer como ella, el papel protagonista sería para Mauricio. Lo consiguieron, y ella se convirtió en un peón en su camino hacia el éxito.