¡Por favor, sé mi pareja! romance Capítulo 121

Resumo de Capítulo 121: ¡Por favor, sé mi pareja!

Resumo do capítulo Capítulo 121 de ¡Por favor, sé mi pareja!

Neste capítulo de destaque do romance Hombre lobo ¡Por favor, sé mi pareja!, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.

Punto de vista de Riven

Entré a la casa de huéspedes con la esperanza de que mis amigas me ignoraran. Pensé que me libraría de sus preguntas.

“¿Y bien? ¿Cómo estuvo tu cita?”, preguntó Mickey con una sonrisa.

¡M*erda! Hablé demasiado pronto.

“Bien”.

“¿Solo bien?”.

“Sí”.

Me miró con los ojos entrecerrados y se levantó de su asiento.

“No te muevas. Tú, yo, Wendy y Ava tenemos que hablar”.

“Al menos déjame cambiarme de ropa”.

“No, sabemos lo que intentas hacer”.

“Pero…”.

“¡Que no! Primero, queremos todos los detalles. Luego puedes hacer lo que se te antoje”, dijo con una expresión que, a decir verdad, me recordaba a la de mi madre cada vez que nos atrapaba a mí y a mi hermano tratando de escabullirnos.

“Vale”.

“Buena chica. Ahora, ven conmigo”.

Fuimos a mi habitación con mis otras amigas detrás de nosotras.

“Ahora sí, comienza a hablar”, dijo Wendy emocionada.

Puse los ojos en blanco y les conté cada detalle de mi cita con Zaden, incluido el beso de al final.

“¿Y qué piensas?”.

“¿Sobre qué?”, respondí.

“¿Vas a volver a vivir con él?”.

“Todavía no estoy segura, chicas. Tengo miedo”.

“Lo sabemos”, respondió Wendy

“Pero también sabemos que, si hay alguien que puede darle una pelea dura a esa bruja, esa eres tú”. Mickey me dio unas palabras de aliento.

La miré y respondí: “Tal vez tenga más poderes que ella, pero es muy astuta. Primero, trató de separarme de Zaden, luego envió a alguien para que me diera unas hierbas y ahora ni siquiera sé que está planeando. Tengo miedo de lo desconocido. No sé nada sobre ella, excepto que es la Maestra de su aquelarre y tiene el poder de controlar el fuego”.

“Tienes razón. Otras brujas me contaron historias sobre ella. Es una mujer desalmada”, comentó Wendy.

“Vaya, gracias por el ánimo”, respondí con sarcasmo para ocultar el miedo que comenzaba a crecer dentro de mí.

“No lo digo para desanimarte, Riven. Solo digo que tienes razón. No sabemos nada sobre la persona con la que vamos a pelear. ¿No deberíamos saber cuántas brujas hay en su aquelarre o cuántos otros aquelarres están bajo su control? ¿Cuántos aliados y cuántos enemigos tiene?”, dijo Wendy.

Ava intervino: “Ahora que lo dices, es verdad. Deberíamos saber algo sobre ella, pero no tenemos nada. Estamos seguras de que sabe sobre ti. Sabe que estás aquí y que te estás preparando para luchar contra ella. También conoce tus poderes y a tu compañero. Nuestros compañeros son nuestra fortaleza y nuestra debilidad. En pocas palabras, conoce tus puntos débiles, pero nosotras no sabemos nada sobre ella”.

Todas me abrazaron y caminaron en dirección a la puerta. Tan pronto como Mickey la abrió, dos figuras se alejaron por el pasillo oscuro a toda velocidad, dejando atrás a Liam congelado. Al parecer, no pudo correr a tiempo y ahora solo estaba sonriendo avergonzado mientras se frotaba el cuello.

“¿En serio estabais escuchando a escondidas…?”, preguntó Wendy, mirando a Liam.

Parecía que los chicos habían estado detrás de la puerta, intentando escuchar nuestra conversación. Traté de no pensar en cuánto tiempo habían estado ahí y lo que podrían haber escuchado.

Sí… Sería mejor que no pensara al respecto.

“¿Escuchando a escondidas?”. Liam se rio con nerviosismo, moviendo las manos hacia nosotras mientras lo mirábamos con las manos en las caderas.

“¿Qué? Pff. Claro que no… Solo vine para preguntaros si habías visto mi… Mmm… mi cargador. Sí, vine a preguntaros si habías visto mi cargador. ¿No lo habéis visto por algún lado? No puedo encontrarlo”.

Enarqué las cejas. “¿En serio? ¿Así que viniste por tu cargador?”.

“Sí y vosotras pensasteis que estaba escuchando a escondidas. ¡Ja! Tenéis una imaginación muy alocada, no tengo tiempo para esas cosas”.

De repente, su compañera lo cogió del oído y lo retorció.

“¡Ay! Cariño, ¿por qué no me crees? Te juro que no estaba haciendo nada malo. Bueno, Damon y Kyle estaban aquí, pero yo solo vine para… ya sabes, para decirles que estaba mal y que no deberían estar escuchando. Los estaba regañando”.

“Ahora es el momento de que yo te regañe”.

En cuanto lo soltó, salió corriendo por el pasillo, como la gente en una zona de productos gratis en un supermercado. Nos reímos entre nosotras mientras las chicas bajaban tras él. Esos hermanos eran muy peculiares, justo por esto me encantaba pasar tiempo con ellos.

Después de que se fueron, me cambié de ropa, salté a mi cama y me quedé dormida mientras pensaba en Zaden.

[N. del A.: Lo siento por el capítulo corto, pero tuve que asistir a otro funeral de uno de mis primos. Es deprimente cuando la gente que amas te deja. La situación aquí está empeorando. Os pido a todos que os mantengáis a salvo].

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: ¡Por favor, sé mi pareja!