Resumo do capítulo Capítulo 27 de ¡Por favor, sé mi pareja!
Neste capítulo de destaque do romance Hombre lobo ¡Por favor, sé mi pareja!, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
Trato de recordar dónde dejé caer la camisa de Zaden, con la esperanza de que no la hubiera movido. Asomo mi cabeza por la puerta y lo veo caminando por la habitación mientras murmura algo para sí mismo. Veo que la camisa está tan cerca como para cogerla sin que se dé cuenta. Estiro el brazo poco a poco, como una garra de una máquina de premios, y atrapo mi objetivo.
Tampoco tengo ropa interior limpia aquí, así que esto tendrá que bastar. Me la pongo, agradecida de que sea de un material grueso y tan largo como para cubrir mi trasero. Luego salgo del baño en silencio. Él deja de caminar y me mira con los ojos llenos de deseo.
Se toma su tiempo para acercarse, me coge de las caderas, tira de mí y choca su cuerpo contra el mío. La camisa se levanta un poco y deja expuesta la parte baja de mi trasero.
“¿Por qué eres así?” Su pregunta me tomó por sorpresa.
“No soy de ninguna manera.” Respondí con inocencia.
“Sí lo eres. Me has estado provocando durante toda la noche, cachorra. No creas que olvidé lo que hiciste en la pista de baile o tu castigo. Necesitas aprender a respetarme como tu Alfa y no solo como tu compañero.”
No pude evitar soltar un resoplido muy poco femenino. “Toda la noche hice lo que me pediste y, aun así, no puedes mostrarme el respeto suficiente para llamarme por mi nombre sin que sea una amenaza. Entonces, Alfa, no me exijas respeto porque, si lo quieres, tienes que ganártelo.”
Me gruñe furioso y me muevo para soltarme de su agarre, haciendo que la camisa se levante más. Ahora, la mitad de mi trasero está al aire. De repente, recuerdo el espejo que está detrás de mí. Él no afloja su agarre en lo absoluto y, en cambio, lleva su boca a mi cuello desnudo.
“Sigue moviéndote. Estoy disfrutando el espectáculo.”
Mis mejillas se sonrojan y me quedo inmovil. Él comienza a acomodar la camisa hacia abajo a propósito, deslizando sus manos cálidas sobre mi trasero. Entonces, coloca sus manos debajo de mis muslos expuestos, me levanta y mis reflejos me hacen rodear su torso desnudo con mis piernas.
¿Qué está haciendo?
¿Llegó el momento de que lo hagamos?
¡Pero no estoy lista!
¿Cómo se lo digo?
“¿Por qué?” Pregunté con una voz suave. Estaba estupefacta y no quería hacerlo enojar.
“Somos compañeros. Tengo que…” Lo interrumpí antes de que siguiera.
“No me refería a eso. ¿Por qué quieres marcarme si está claro que te disgusto? ¿Por qué nos harías pasar por eso a ambos?” Gira en la cama para mirarme y abre la boca para hablar. Yo también lo miro y levanto la mano para que no diga nada. “Déjame hablar, por favor.”
Él asiente y me deja continuar.
“Estoy dispuesta a asumir mi papel por ti, de verdad, pero necesito algo a cambio. Dame tiempo, no sé si podré cumplir mi papel sabiendo que me marcaste sin preguntarme, ni mi consentimiento. Sé que es lo que debemos hacer como compañeros y líderes de una manada, pero ¿cómo puedes esperar que gobierne a tu lado si me obligaste a enamorarme de ti?”
Al final de mi discurso, las lágrimas comenzaron a deslizarse por mi rostro. Él estira la mano y las limpia, todo mientras nos mirábamos a los ojos. Respira hondo y me doy cuenta de que está preguntándose si marcarme ahora o más tarde. Sus ojos están cambiando de color, lo que me indica que estaba discutiendo con su lobo.
Espero que escuche mi opinión y no me marque ahora mismo.
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: ¡Por favor, sé mi pareja!