¡Por favor, sé mi pareja! romance Capítulo 64

Resumo de Capítulo 64: ¡Por favor, sé mi pareja!

Resumo de Capítulo 64 – ¡Por favor, sé mi pareja! por Internet

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"¿Luna?".

Escuché una voz que me llamaba a mis espaldas. Había estado tan absorta en mi trabajo que perdí la noción del tiempo.

"¿Luna?".

"Mmm".

Con un gruñido, volteé la cabeza hacia la persona que estaba interrumpiendo mi trabajo. No me gustaba que me molestaran, en especial cuando estaba haciendo algo importante. Miré hacia atrás y encontré a mi guardia favorito con una mirada ansiosa.

"¿Qué?", pregunté.

"Nada, es solo que nos tenía preocupados. No se unió a nosotros para comer. Nos pareció extraño porque usted siempre come con nosotros", respondió él mientras miraba el suelo como si fuera lo más interesante.

Me levanté y me estiré. Mi cuello y mi espalda crujieron con el movimiento.

"¿Qué hora es?", pregunté frotándome el rostro.

"Ya es casi de noche", murmuró él.

"¿Qué? ¿En serio?".

Estaba sorprendida porque Zaden no me había llamado ni se había vinculado mentalmente conmigo para que comiéramos juntos, como lo hacía en los últimos días. Siempre me arrastraba para que al menos pudiéramos comer y cenar juntos.

"¿Por qué no me avisaste antes?".

"No pudimos encontrarla y salimos a comer con la esperanza de que se uniera al Alfa, pero nunca vino".

Yo asenti.

"¿Estaba tu Alfa ahí?".

Él asintió en respuesta.

Algo no andaba bien. Tenía la sensación de que se debía a lo de anoche. ¿Estaba enojado conmigo? Solo le había hecho una simple pregunta.

Con un bufido, empecé a recoger todos los papeles y bajé las escaleras. De repente, me detuve a mitad de camino. Zaden estaba hablando con los omegas que custodiaban la misma puerta que había visto antes.

Fruncí el ceño.

¿Qué estaba pasando?

Al sentir mi presencia, Zaden me miró con los ojos muy abiertos y una expresión de asombro, como si lo hubiera atrapado con las manos en la masa. Sin embargo, tras una fracción de segundo, se compuso y me devolvió la mirada mientras yo lo observaba desde las escaleras. Mis ojos se movieron hacia su cuerpo. Su cabello estaba despeinado y tenía la camisa medio metida. No se veía bien, y él siempre estaba impecable frente a toda la manada.

¿Había algún problema?

¿Había ocurrido otro ataque?

¿Por qué se estaba comportando así?

Como si estuviera escondiendo algo, algo que yo debería saber, pero que él se rehusaba a decirme.

Zaden apartó la mirada. ¡Me estaba ignorando! No era nuevo para mí, pero...él nunca caminaba en esas condiciones, mucho menos frente a los omegas.

Me volví hacia mi guardia, quien observaba atentamente mis movimientos, y levanté las cejas de forma interrogativa. Él bajó la mirada hacia el suelo, como si se sintiera culpable por algo.

Cuando me di la vuelta, encontré a Jake con una enorme canasta.

"Oh, hola", saludé sonriendo.

"¿Está bien?" preguntó él. Yo fruncí el ceño. "¿Sí? ¿Por qué lo preguntas?", repliqué confundida.

"Por nada…", murmuró Jake y me dejó sola después de disculparse.

Me encogí de hombros ante la extraña conversación y busqué en el jardín un lugar para descansar. El olor de las flores era relajante y refrescante. Después de un pequeño descanso, tendría que regresar a la oficina para completar el resto del trabajo. Encontré sombra bajo un manzano y me senté apoyada contra el tronco. Con un suspiro, cerré los ojos y me quedé dormida.

DESPUÉS DE UN RATO

Empecé a sentir un movimiento. Bostecé y abrí los ojos perezosamente. Todo estaba oscuro y hacia mucho frío. Me sentía demasiado cansada para mantener los ojos abiertos, así que incliné la cabeza hacia la persona que me estaba cargando. Su calidez me hacía sentir cómoda.

Cuando entendí que alguien me estaba cargando, me incorporé tan rápido que estuve a punto de caerme de sus brazos. Grité de sorpresa y abracé el cuello de la persona.

Jadeé nerviosamente. La persona no se movió, pero sentí que se tensaba. "¿Zaden?", dije sobresaltada.

Él me miró sin ninguna emoción mientras yo buscaba frenéticamente una manera de bajarme de sus brazos.

"Por favor, bájame", murmuré. Con un suave gruñido, él me dejó caer. Lancé un gemido cuando mi tr*sero golpeó el suelo.

"¿Por qué hiciste eso?", espeté mientras alzaba la mirada. Zaden se limpió la mano con un paño.

"Pérdida de tiempo", murmuró lanzando el trozo de tela. Conmocionada por su actitud, lo vi marcharse. ¿A qué se debía todo esto?

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