Resumo do capítulo Capítulo 90 do livro ¡Por favor, sé mi pareja! de Internet
Descubra os acontecimentos mais importantes de Capítulo 90, um capítulo repleto de surpresas no consagrado romance ¡Por favor, sé mi pareja!. Com a escrita envolvente de Internet, esta obra-prima do gênero Hombre lobo continua a emocionar e surpreender a cada página.
Su expresión me daba a entender que tenía miedo de que podía morir si me ayudaba.
“No he matado a nadie que haya intentado ayudarme.” Le expliqué.
Ella asintió y parecía estar un poco más tranquila.
“Supongo que lo primero que debemos practicar es tu puntería y tu velocidad.” Liam enarcó una ceja y, de repente, parecía interesado en lo que estábamos haciendo mientras que Caleb y Kyle estaban ocupados con algo en sus móviles.
“Liam, ¿tienes algo que podamos usar como objetivos en movimiento?” Preguntó Wendy. Al parecer, él tenía una idea de lo que podríamos usar porque corrió escaleras arriba y desapareció en un instante. Poco después, regresó con una gran caja marrón con lo que parecían ser pequeños platos blancos.
Damon se echó a reír. “Nunca pensé que vería el día en que Riven tendría que disparar al plato.”
Puse los ojos en blanco y liberé suficiente energía para volcar hacia atrás la silla en la que estaba sentado, lo que provocó que aterrizara sobre su trasero. Ahora era mi turno para reír mientras él se ponía de pie y trataba de limpiarse el polvo. No estaba enojado, todo lo contrario, estaba orgulloso.
“¿Cómo hiciste eso?” Preguntó.
“Como dije, estuve practicando toda la noche. Entendí que controlar el fuego no se trata del elemento en sí, sino de controlar la energía que me rodea, así que usé la tuya para empujarte.”
“Bien, te estás acostumbrando a tus poderes. Ahora, ¿podemos concentrarnos en el entrenamiento, por favor?”
Wendy quería presenciar cómo se manifestarían mis poderes en una batalla improvisada, así que me arrojó un plato por el aire y me dijo que intentara dirigir mi energía hacía él. Sin embargo, su plan no funcionó, solo podía empujarlos y evitar que cayeran al suelo. Hasta ahora, me las había arreglado para disparar suficiente energía con mi mente a un par de platos. La noche anterior, había descubierto que también podía hacer esto, pero el resto de los platos me golpeó en la cara y el pecho.
“Wendy, en muchas de las ocasiones en las que los poderes de Riven parecieron ser más fuertes fueron cuando tuvo una reacción emocional extrema a algo.” Cole mencionó.
Era la verdad. A menudo, era por la ira, pero algunas de mis mejores demostraciones de poder las había realizado por miedo.
Asentí y ella fue a sentarse junto a Caleb. Su compañero murmuró algo en su oído que hizo que se sonrojara mucho. Él la besó en ambas mejillas y ella se rio como una colegiala.
“Vale, vale, concentraos en el entrenamiento o buscad una habitación.” Dijo Kyle en broma y pude ver una sonrisa en el rostro de Caleb.
“¿En qué te gustaría trabajar ahora?” Preguntó Cole.
Recordé la visión del anciano Hashmat. Podía sentir mi poder latiendo dentro de mí como energía pura, vibrando y rodando justo debajo de la superficie, como si supiera que me estaba preparando para invocarlo. Entonces, dejé que saliera de mí y me bañara con la fuerza de una cascada violenta.
Sentí que cada hueso de mi cuerpo se rompió y se reconstruyó en la forma que más amaba, mi loba. Quería ver si podía usar mis habilidades en esta forma.
“Esto será interesante.” Dijo Rhea.
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