¡Por favor, sé mi pareja! romance Capítulo 117

Sobre ¡Por favor, sé mi pareja! - Capítulo 117

¡Por favor, sé mi pareja! é a melhor série atual do autor Internet. Com o conteúdo de Capítulo 117 abaixo, nos perderemos em um mundo de amor e ódio, onde os personagens usam todos os truques para atingir seus objetivos, sem se preocupar com a outra metade, apenas para se arrepender tarde demais. Leia o capítulo Capítulo 117 e acompanhe os próximos capítulos desta série em booktrk.com.

Punto de vista de Zaden

Solo tenía que preparar un baño caliente y cocinar algo especial. Sonaba fácil.

Sin embargo, sentía algo diferente en mi corazón. Era la primera vez que hacía este tipo de cosas. Esperaba que le gustara. Lorcan tenía razón, se lo merecía.

Busqué en internet cómo preparar un baño tibio perfecto y romántico. Encontré unas instrucciones de cómo hacerlo y las seguí al pie de la letra.

El primer paso era elegir el baño de burbujas perfecto para la ocasión.

Busqué qué fragancia era la mejor para un baño tibio y relajante. Encontré que era la lavanda, así que escogí una espuma para baño de lavanda Loccitane. Decía que aclaraba la mente y mejoraba la vitalidad.

“Esto debería ser perfecto para ella”, pensé.

El segundo paso era conseguir unas velas y un encendedor, o unas velas eléctricas de aspecto realista por seguridad. Me parecía ridículo porque, en mi opinión, ¿para qué necesitaba velas si podía usar las luces? No obstante, lo dejé pasar y seguí las instrucciones.

Lo siguiente era colocar las velas cerca de un espejo o en una superficie reflectante para magnificar el efecto de la luz suave. También me parecía absurdo, me estaba frustrando con todos estos pasos, pero me recordé a mí mismo que estaba haciendo todo esto por mi compañera.

A continuación, decía que colocara un apagador de velas bonito y funcional en caso de que usara velas reales.

¿Qué tenía que ver todo esto con un simple baño? ¿De verdad era necesario?

¡Puaj! Solo esperaba que dijera que sí o me volvería loco.

El quinto paso era agregar algunos accesorios de baño para mejorar la experiencia. Decidí traer una botella helada de un buen vino de la despensa y una copa.

Después, saqué las toallas de baño más grandes, lujosas y, de preferencia, abrigadoras. También puse música para ponerla en el estado de ánimo que quería. Era una canción llamada River Flows In You de Yiruma.

Por último, verifiqué la temperatura del agua. No estaba ni demasiado caliente ni demasiado fría, era perfecta.

¿Quién hubiera imaginado que organizar un baño caliente podía ser tan agotador?

Ahora tenía que preparar el almuerzo para los dos. Mientras cocinaba, las trabajadoras de la cocina no dejaban de mirarme. Algunas me ofrecieron su ayuda, pero la rechacé. Preparé algunos platos italianos rápidos que conocía, también guacamole, ensalada, goulash y serví helado de arándanos como postre.

Revisé los arreglos por última vez solo para estar seguro. A decir verdad, me sentía orgulloso de mí mismo por haber logrado estas tareas tan simples.

Ahora solo me quedaba rogar que aceptara salir conmigo.

Punto de vista de Riven

Este día fue muy agotador porque habíamos entrenado sin descanso. Para ser honesta, en el fondo, estaba asustada por el siguiente movimiento de la bruja malvada, pero tenía que poner una cara valiente. Me mantuve fuerte, fresca y serena frente a mi gente. Hablé con muchos de ellos para asegurarles que no permitiría que nadie les hiciera daño. Funcionó en algunos mientras que otros todavía no estaban seguros, pero, al final del día, todos decidieron unirse a nosotros. Luego hice una visita rápida a la guardería. Pasar tiempo con los niños me relajaba mucho. Todos me dieron la bienvenida emocionados, pero, justo cuando entré, un grito llamó mi atención.

Levanté a la niña que no dejaba de llorar, la puse en mis brazos y le di unas palmaditas en la espalda. La pequeña se calmó y pronto se retorció para que la bajara. Corrió con sus amigos para jugar a la familia. Deseaba que hubiera momentos en los que yo pudiera dejar de ser un adulto y actuar como una niña de nuevo. No obstante, por desgracia, era una Luna y siempre tenía cosas que hacer.

“Luces cansada, querida”. La encargada de la guardería me dijo en voz baja.

Capítulo 117 1

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: ¡Por favor, sé mi pareja!