¡Por favor, sé mi pareja! romance Capítulo 168

Punto de vista de Zaden

“¿A qué te refieres con que me alimente?”, pregunté.

“Yo puedo entrar en su mente porque es mi segunda naturaleza, pero, para que tú puedas hacerlo, necesitas una emoción que alimente tu determinación de salvarla”, explicó el hada. “Y esa emoción debe ser muy fuerte”, agregó.

Lorcan se rio y puso los ojos en blanco.

“Todo el mundo sabe cuánto ama a nuestra Luna. La necesidad de que su compañera y su cachorro sobrevivan, además de los momentos que vivieron juntos son más que suficientes para alimentar su determinación”, comentó Lorcan.

“Es fácil para ti decirlo, pero yo soy la que tendrá que hacerlo entrar”, siseó Lillian.

“Solo hazlo, mi amor. Sé que puedes hacerlo”. Eduardo la motivó.

“¿Podrías dejar de llamarme así? Ya tengo suficiente estrés con todo esto”. Lillian ya no lo soportó.

“Lillian, Zaden, solo hacedlo porque, si esto falla, todos moriremos. Al principio, pensamos que Riven no lastimaría a ninguno de nosotros porque somos sus amigos. Sin embargo, si pudo lastimaros a vosotros dos, será capaz de hacer cualquier cosa. Además, echo de menos a mi amiga y hermana”, dijo Liam.

Riven estaba dormida ahora. Samara y otras brujas prepararon un hechizo tan fuerte como para hacerla dormir por un período más largo.

“Ya estamos listos”, indicó Lillian.

Se suponía que debía acostarme y dejarla entrar en mi mente, así que lo hice.

Me acosté a lo largo del sofá y ella se colocó cerca del apoyabrazos donde estaba mi cabeza. Cerré los ojos y derribé todas las paredes que le impedían entrar en mi mente. Sentí sus manos a los lados de mi cabeza y esperé. No sabía cuánto tiempo había pasado, pero, después de un rato, me sentí adormecido.

Esto no era lo que esperaba. ¿Se suponía que solo debía quedarme dormido?

“¡Sal de tu j*dida cabeza!”, dijo Lillian y abrí los ojos al instante para mirar a mi alrededor. Todo estaba igual, excepto que podía ver mi cuerpo durmiendo en el sofá.

“¿Qué diablos está pasando? ¿Estoy muerto?”, pregunté incrédulo.

“A veces me pregunto si de verdad eres un Alfa. Claro que no, solo estás en la dimensión, o puedes llamarlo espacio, que separa el mundo real del espiritual”, respondió.

“¡Ah! ¿Y ahora qué?”.

“Ahora, no sigamos perdiendo el tiempo y vayamos a tu habitación, donde Riven está durmiendo”. Asentí y la seguí. No estaba seguro de qué estaba pasando, pero algo dentro de mí me decía que esta era mi única oportunidad y que no podía arruinarlo.

“¿Por qué siento… no sé, como si no pesara, supongo?”, pregunté para distraerme de los pensamientos negativos.

“No estás en tu cuerpo, cargando con el peso de todos tus músculos, órganos y huesos. Es normal que sientas que no pesas”, siseó. Era más que obvio que estaba irritada por mi pregunta.

Cuando por fin llegamos a nuestra habitación, atravesamos las puertas sin abrirlas.

¡Esto era genial!

Nos paramos cerca de la cabecera y noté que, si bien Riven estaba dormida, su cuerpo no estaba relajado del todo.

“Creo que todavía no está en un sueño profundo”, comenté.

“No, pero está a punto”, respondió Lillian. Luego tomó mi mano izquierda con su derecha y colocó su mano libre sobre la frente de Riven. Copié sus acciones mientras cerraba los ojos. Podía sentir que me desvanecía una vez más, pero esta vez fue un poco diferente.

“Ambos tenéis un vínculo especial. Estarás con ella pronto, solo necesitas pensar en qué decirle y cómo hacer que regrese”, susurró en mi oído y sentí un escalofrío por todo mi cuerpo, como si estuviera enterrado en lo profundo del hielo.

“Abre los ojos”, susurró una voz, pero no era la de Lillian. Miré a mi alrededor para ver si ella estaba bien, pero no la veía por ningún lado.

“¡¿Lillian?!”, grité en un susurro. “¿Lillian?”, pregunté de nuevo.

“Zaden, estoy aquí, pero debes apresurarte. Puedo sentir la energía en este lugar, es oscura y llena de malicia”, dijo desde algún lugar que no podía ver.

“Pero ¿dónde estás?”, pregunté.

“Estoy sosteniendo el portal del tiempo suficiente para que la traigas de vuelta”, respondió.

“¿Y cómo puedo encontrarla? Está muy oscuro”.

“Solo haz lo que te dije, usa tus emociones para alimentar tu motivación y la encontrarás”.