El Rey Lycan y su Oscura Tentación romance Capítulo 96

Leia El Rey Lycan y su Oscura Tentación 096. TESTIGO INESPERADO

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El Rey Lycan y su Oscura Tentación por Internet

ALDRIC

Antes de irme por completo volví a mirar hacia el borde del abismo, su sangre y la mía manchaba la tierra, ahora con el embrujo roto podía olerla con claridad, yo la había atacado con intenciones de asesinarla.

Solo Quinn y Celine la defendieron de mí, ellos lo sabían, ellos también me mintieron, al menos se pudieron colar a donde sea que la hayan llevado, espero que la protejan y me ganen algo de tiempo.

Esto no lo pudo haber hecho ese hijo de puta del Rey Vampiro solo, ¿cómo supo que vendríamos aquí? Todo parecía demasiado preparado, incluso me alejaron diciéndome que había una vampira para predisponerme en contra de ella.

— ¡Su majestad!, ¿qué sucedió, escuchamos los ruidos de luchas, no nos atrevimos a acercarnos a la niebla, está herido, ¡tome un abrigo!

— Reúne a todos los miembros de tu manada, menos a los cachorros, ¡AHORA! – le rugí al Alfa que me esperaba con algunos guerreros al pie de la montaña.

Estaba que veía rojo de la desesperación, pero tenía que poner mi mente a funcionar, sacar la verdad de todo esto.

Tomé algo de ropa que me extendieron y me la enredé en las caderas, me subí al viejo escenario de madera y arrojé el cuerpo de esa cosa frente a todos que dieron un paso atrás asustados, haciendo un semicírculo.

— ¿Dónde está la Regente de las manadas? – la busqué entre los presentes, si no estaba, entonces ella sola se habría delatado, sin embargo, dio un paso adelante, nerviosa.

— Su alteza, yo, yo lamento lo que le sucedió a su hembra, no sabía…

— ¿No sabías qué? Ni siquiera te he preguntado nada ¿Qué lamentas exactamente maldit4 mentirosa? – le hablé de la manera más fría que me pude enfrentar a alguien jamás.

Mi aura opresiva llena de dolor y de ira aplastándolos sin compasión.

Mientras más lo pensaba mayores eran mis sospechas, sobre todo contra esta mujer.

— ¡Yo no sé nada su majestad, solo me pareció ver a Valeria siendo atacada por esa vampira, corrí asustada porque hirió a mi nieto! – cayó de rodillas llorando y suplicando.

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