La Genio Anónima: Mi Esposo Firmó el Divorcio Sin Saber Quién Soy romance Capítulo 198

El laboratorio de Axon AI era un santuario de silencio y luz azulada a las diez de la noche.

Solo el suave zumbido de los servidores y el tecleo rítmico de dos teclados rompían la calma.

Era un ritual.

Una vez a la semana, cuando el resto del edificio se había vaciado, Camila y David se quedaban hasta tarde. No por obligación, sino por placer.

Era su espacio. El lugar donde las ideas nacían, donde los problemas complejos se desentrañaban y donde el futuro se escribía en líneas de código.

Hicieron una pausa.

David se levantó y regresó de la pequeña cocina con dos cajas blancas de cartón y un par de palillos.

Se sentaron en el suelo, con la espalda apoyada contra una pared de cristal que daba a la sala de servidores, y comieron fideos chinos directamente de las cajas.

La ciudad de México se extendía bajo ellos, una galaxia de luces parpadeantes.

—El equipo de Tokio está haciendo un trabajo increíble con la implementación de "Nexus" en el sistema del tren bala —dijo David entre bocados.

—Lo sé. Su última optimización del algoritmo de enrutamiento fue brillante —respondió Camila—. Tenemos que darles una bonificación.

Comieron en un silencio cómodo por un momento, el tipo de silencio que solo existe entre dos personas que se conocen a la perfección.

—¿Te arrepientes de algo, Cami?

La pregunta de David fue suave, casi casual, pero estaba cargada con el peso de casi una década de historia compartida.

—De todos estos años.

Camila dejó los palillos sobre su caja de cartón.

Miró por la ventana, hacia el horizonte infinito de la ciudad.

Las luces parecían estrellas caídas, cada una un sueño, una historia, una vida.