La Genio Anónima: Mi Esposo Firmó el Divorcio Sin Saber Quién Soy romance Capítulo 112

Rodrigo Ibáñez salió furioso del club privado, la negativa de Gabriel Corcuera todavía resonando en sus oídos.

—¿"No es mi lugar interferir"? —masculló para sí mismo, metiéndose en su auto deportivo—. ¡Cobarde!

Si sus amigos no iban a ayudarlo, tendría que recurrir a una autoridad superior. Marcó el número privado de su padre.

—Papá, soy yo. Necesito un favor.

Del otro lado de la línea, la voz de Renzo Ibáñez era calmada y autoritaria.

—Te escucho.

—Hay una mujer, Camila Elizalde, de Axon AI. Está bloqueando un acuerdo importante por un rencor personal. Necesito que hables con su mentor, el Dr. Benjamín Reyes. Una llamada tuya sería suficiente para ponerla en su lugar.

Hubo un largo silencio. Rodrigo esperó, confiado. El nombre de su padre abría todas las puertas.

—Entiendo —dijo finalmente Renzo—. Déjame ver qué puedo hacer.

Colgó. Rodrigo sonrió, satisfecho. El problema estaba resuelto.

A la mañana siguiente, Camila estaba en su oficina revisando proyecciones financieras cuando sonó su teléfono privado. Era un número desconocido, pero con un prefijo que denotaba poder.

—¿Diga?

—Señorita Elizalde, habla Renzo Ibáñez.

Camila se enderezó en su silla, sorprendida. El padre de Rodrigo. Uno de los hombres más influyentes del país.

—Señor Ibáñez. Es un honor. ¿En qué puedo ayudarlo?

—Iré al grano —dijo la voz de Renzo, amable pero firme—. Mi hijo, Rodrigo, está muy interesado en colaborar con Axon AI. Entiendo que su propuesta fue rechazada.

—Fue evaluada por nuestro comité, señor. No cumplía con nuestros requisitos técnicos.

—Lo sé. Y él ha sido un tonto impulsivo —admitió Renzo, para sorpresa de Camila—. Pero me gustaría pedirle, como un favor personal, que le dé una segunda oportunidad. Él preparará una nueva propuesta, esta vez con la supervisión de mi equipo.